En los Estados Unidos muchas cosas andan mal desde hace muchos años. Eso no es noticia. Es conocida la historia de agresiones, de actos de guerra, del genocidio en Vietnam, de intervención armada en las repúblicas americanas, del bloqueo genocida contra Cuba, de las llamadas guerras preventivas basadas en mentiras del gobierno para justificar agresiones a estados soberanos. De una «cruzada» contra el terrorismo que nada tiene que ver con las «santas cruzadas» de antaño, porque no hay que ir ahora a buscar tan lejos a los «herejes» (terroristas), están en su país. Para rescatar actualmente el «santo sepulcro de la paz» tendrían primero que poner orden en su propia casa.
Los cronistas, esos rapsodas de lo hermoso y lo feo, de lo insólito, no usan corbata ni hacen genuflexiones; no ansían las coberturas periodísticas de los grandes salones, seducidos como están por los callejones misteriosos de este mundo.
Puede que el 2006 sea el año de más bajos índices de siniestros viales en los últimos tres lustros. De enero a agosto hubo 465 accidentes, 77 muertos y 214 lesionados menos que en igual etapa del año anterior. Si en lo que queda se sigue la flecha de los primeros ocho meses, las estadísticas quedarían por debajo del «duro» y «buen» año 2003.
«El mundo es mi representación» Arthur Schopenhauer
Durante las primeras semanas de la enfermedad de Fidel, ocurrieron cosas interesantes en el mundo mediático, como por ejemplo, prender el televisor y encontrarse de pronto con el periodista cubano Randy Alonso hablando a cámara, algo completamente insólito en Buenos Aires, acostumbrados como estamos a la información sobre Cuba fabricada en Estados Unidos y difundida en el mun...
El texto del 4 de octubre añade que el liderazgo del IRA «continúa instruyendo a sus miembros que no usen la fuerza física», y llega incluso a expulsar de sus filas a quien viole este principio, además de haber desmantelado sus estructuras «militares» y cesado el reclutamiento de simpatizantes. De hecho, «su continua inacción ha erosionado su capacidad», apunta el informe.
El comentarista se queda habitualmente a medias. Creía yo —y alguien me lo hizo notar— que había sido muy crítico con el movimiento sindical el viernes anterior al inicio del congreso 19 de la CTC. Y unos días más tarde comprendí que Raúl, en el discurso final, había sido mucho más crítico en su evaluación. Nadie, me parece, puede tener duda.
Probablemente pensemos que la libertad de expresión es una de las principales garantías que pueda haber en un país como Estados Unidos. Ya que el modelo neoliberal no garantiza muchos derechos sociales dejados a merced de la economía privada, muchas personas quizá sigan convencidas de que logros como el derecho de disentir sea un derecho inalienable en el país de Bush. Veamos algunos ejemplos de cómo está la situación limitándonos tan solo a los últimos 15 días de agosto.
Pese a que las encuestas no lo muestran, Bush sigue haciendo muy bien su papel en la Casa Blanca. No importa que casi un 60 por ciento de los encuestados repruebe su gestión. Las petroleras, el complejo militar industrial, las farmacéuticas y otros especímenes del capital están de plácemes con los dividendos que les reportan la torpe conducción actual de la administración norteamericana. Y no es para menos. Los pobres y los descontentos que se conformen con sus protestas.
Nada errado anduvo el César con su «divide y vencerás». Si un pueblo se deja azuzar por sus enemigos, se confunde, se vuelve contra sí mismo y se distrae de sus objetivos más nobles, dará alegría a sus opresores: el yugo permanecerá.
El hombre tenía 32 años, era camionero e incubaba un odio de por lo menos dos décadas. Es lo que sabemos. También, que ató a tres niñas contra el pizarrón de su aula y disparó varias veces con una pistola automática, apuntándoles a la cabeza y los brazos. Al menos siete pequeñas resultaron gravemente heridas cuando el hombre, antes de suicidarse, descargó el arma a tontas y a locas sobre las que habían asistido a la ejecución de sus compañeras. Las edades de las niñas oscilan entre los seis y los 13 años.