Ante el edificio de Rapid City donde sesionaba la audiencia se exigió la libertad de Peltier. Autor: Tomada de Twitter Publicado: 04/07/2024 | 04:08 pm
Se renueva la revancha y la injusticia. Encontró el muro de contención del Buró Federal de Investigaciones, obcecadamente opuesto a verlo en libertad, el último intento de liberar anticipadamente al líder del movimiento de resistencia indígena de Estados Unidos, Leonard Peltier, quien en una prisión federal de Florida ya ha cumplido casi 50 años de la condena a dos perpetuas consecutivas, por la falsa acusación de la muerte de dos agentes del FBI en 1975,en la reserva indígena de Pine Ridge, Dakota del Sur, pero siempre ha mantenido su inocencia.
El martes de esta semana (2 de julio), su abogado Kevin Sharp comunicó que la Comisión Federal de Libertad Condicional negó la solicitud de libertad condicional por razones humanitarias para Leonard Peltier, el activista de los derechos indígenas. Si no tuvieron en cuenta los 49 años que ya ha pasado en la cárcel, tampoco su avanzada edad de 79 años, su historial no violento en la prisión, ni su deterioro de salud (diabetes, hipertensión, ceguera parcial por un derrame cerebral y ataques de Covid).
Parece una grotesca burla —cuando apenas faltaban un par de día para este 4 de julio en que a bombo y platillo celebran en Estados Unidos el día de la independencia, en cuya génesis no contaba la población nativa, ni la esclava negra—, que se fijara una audiencia provisional para 2026 y una audiencia completa para junio de 2039, cuando Peltier tendría 94 años de edad.
También comunicó que la comisión ha recomendado que la Oficina Federal de Prisiones revise los registros médicos de Leonard Peltier y evalúe si debe ser transferido a un centro médico que opere la agencia carcelaria.
Sharp planea apelar la decisión de la comisión y fue enfático en su juicio: «El anuncio de hoy continúa la injusticia de esta larga experiencia para Leonard Peltier». «Esta decisión es una oportunidad perdida para que Estados Unidos finalmente reconozca la mala conducta del FBI y envíe un mensaje al país indio sobre los impactos de las acciones y políticas del gobierno federal de los años 1970».
No le ha faltado al caso el apoyo de destacados grupos de derechos humanos, líderes religiosos y legisladores del Congreso a lo largo de décadas; sin embargo, no han sido suficientes para sus solicitudes tanto de libertad condicional como de clemencia presidencial.
Sin embargo, tampoco son pocas las percepciones de que se necesita, tanto en Estados Unidos como en el escenario internacional, un mayor involucramiento del progresismo en general, de las izquierdas, de las organizaciones defensoras de los derechos humanos y de los movimientos originarios, en la solidaridad con Leonard Peltier, de manera que se den a conocer las circunstancias en que ocurrieron los hechos en la reserva india de Pine Ridge, cuando el movimiento indígena en Estados Unidos luchaba por sus tierras, por el reconocimiento de sus derechos como pueblos, contra la discriminación, y eran ferozmente perseguidos por las llamadas fuerzas del orden.
Nunca hubo pruebas reales de que en el enfrentamiento entre los activistas del Movimiento Indígena Americano que «ocupaba» una tierra que era suya y los agentes policiacos, fuera el chippewa Peltier quien disparó contra los agentes Jack Coler y Ron Williams, pero para el FBI era imprescindible mostrar un culpable y así hicieron.
Lo ha ratificado su actual director, Christoplen Wray, quien elogió el fallo de la Comisión de Libertad Condicional y en un comunicado el martes repitió sentenciosamente: «se le han concedido sus derechos y el debido proceso una y otra vez, y repetidamente, el peso de la evidencia ha respaldado su condena y su sentencia de cadena perpetua».
Nick Tilsen, presidente y director ejecutivo de NDN Collective, una organización de defensa liderada por indígenas, dijo que la última denegación de libertad condicional a Peltier representa un «día triste para los pueblos indígenas y la justicia en todas partes».
El mundo solidario debe también hacer suyas la sentencia de Tilsen: «Aunque estamos desconsolados por la decisión de la comisión de libertad condicional, nuestro trabajo para garantizar que Leonard reciba justicia y libertad continuará con renovada dedicación».