Las más recientes acciones elevaron la tensión entre los gobiernos de Estados Unidos e Irak. Autor: Reuters Publicado: 08/02/2024 | 06:55 pm
Escuadrones de las fuerzas aéreas estadounidenses e israelíes atacaron en las últimas horas Bagdad, la capital iraquí, y la ciudad de Homs en el oeste de Siria, en operaciones de castigo a presuntas milicias proiraníes que respaldan al pueblo palestino frente a la brutal agresión de la ocupación sionista en Gaza.
El asesinato en Bagdad, mediante un ataque de la aviación de Estados Unidos, de Abu Baqir Al Saedi, un alto líder de Fuerzas de Movilización Popular de Irak, provocó de inmediato airadas propuestas y demandas al gobierno nacional de poner fin a la asociación militar con Washington.
El bombardeo con un dron en la noche del miércoles, en un concurrido bulevar comercial de la capital del país mesopotámico, elevó las tensiones existentes entre los gobiernos de Estados Unidos e Irak.
Oficiales militares estadounidenses dijeron que la acción se llevó a cabo alrededor de las 9:30 p.m. «en respuesta a los ataques contra miembros del servicio estadounidense».
Las milicias organizadas bajo la Resistencia Islámica en Irak han enmarcado sus ataques contra el personal estadounidense como una protesta contra la campaña militar de Israel en Gaza y el apoyo estadounidense a Tel Aviv.
Después de que Washington se atribuyó la responsabilidad del asesinato, un portavoz militar iraquí, el mayor general Tahseen Al Khafaji, calificó el ataque en un comunicado como «una clara agresión y violación de la soberanía iraquí».
El gobierno del primer ministro Mohammed Shia al-Sudani había condenado una ronda anterior de agresiones estadounidenses, el 2 de febrero, contra las milicias que forman parte de los servicios de seguridad iraquíes.
Sudani, que visitó en el hospital a los milicianos heridos, también dijo que Irak no debe servir de escenario para el conflicto entre Irán y Estados Unidos.
Las posiciones estadounidenses han sido atacadas con drones, cohetes o misiles al menos 168 veces en ese lapso.
La semana pasada un ataque con dron a una base militar de Washington en Jordania mató a tres soldados estadounidenses e hirió a otros 35, a lo que el presidente Joseph Biden respondió con la amenaza de una fuerte respuesta.
La decisión de Biden provocó reacciones de apoyo en los extremistas pro-sionistas de su Congreso, pero también duras críticas, entre ellas las de Robert Kennedy Jr. candidato presidencial independiente para noviembre de este año.
El sobrino de John F. Kennedy criticó el accionar de los Estados Unidos en el extranjero y prometió cambiar el rumbo de llegar a la Casa Blanca.
«Esta escalada no habría sido necesaria –dijo— si no hubiéramos puesto a nuestros valientes jóvenes en servicio en el punto de mira de estas milicias chiíes —que sólo existen como legado de nuestra guerra ilegal en Irak».
«Tanto Irak como Siria –recordó—, han pedido a Estados Unidos que abandone su territorio», escribió en su cuenta de la red social X (antes Twitter).
Por su parte, Israel volvió a atacar a Siria el miércoles —con la impunidad que le ofrece Estados Unidos—, mediante un bombardeo aéreo a la ciudad de Homs, provocando el derribó un edificio en un barrio residencial y mató a varios civiles.
Israel ha estado bombardeando Siria durante años y ha intensificado significativamente sus ataques aéreos en el país desde el 7 de octubre.
Los ataques israelíes han matado a varios miembros del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI), lo que genera el riesgo de provocar una guerra importante en la región.
Según informes, no confirmados, un asesor del IRGC murió en ataques aéreos israelíes en Damasco el viernes pasado.
Más tarde ese día, Estados Unidos lanzó una serie de ataques aéreos en Irak y Siria que, según las fuerzas armadas estadounidenses, tenían como objetivo el IRGC y las milicias afiliadas.
Unas 40 personas murieron en el bombardeo estadounidense, pero según dijo Antiwar. com no hay señales de que hubiera muerto ningún iraní.
Varias facciones de la resistencia iraquí se unieron después del inicio de la guerra entre Hamás e Israel en octubre, formando la coalición Resistencia Islámica en Irak (IRI).
Los ataques a las bases estadounidenses en Irak también sirvieron para acelerar la retirada de las tropas estadounidenses del país.
El primer ministro también afirmó que la Región del Kurdistán iraquí (IKR) está involucrada en las conversaciones para asegurar la retirada de Estados Unidos.
Se sabe que el IKR sirve como centro para agencias de inteligencia extranjeras, incluidas la CIA y el Mossad iraelí.
Sin embargo, Washington insiste en mantener la presencia de unos 3 500 soldados en Irak y ha dicho públicamente que las conversaciones no tienen como objetivo lograr una retirada estadounidense.