Los estudiantes participan en el 18vo. CLAE en Venezuela por Nuestra América Autor: Cortesía de la Oclae Publicado: 24/04/2019 | 11:16 am
CARACAS, Venezuela.— Hasta la Plaza Bolívar, adonde mismo llegara el Apóstol de nuestra independencia tras diligencia agotadora y donde, sin quitarse el polvo del camino se conmovió al pie de El Libertador y sintió que el prócer se le inclinaba como un padre ante su hijo, llegó este domingo nuestra delegación al 18vo. Congreso Latinoamericano y Caribeño de Estudiantes (CLAE), que tiene por sede a la heroica Venezuela.
Allí, ante la estatua ecuestre de Bolívar sobre su caballo —que lucía más hermosa y reluciente que de costumbre, como me confesaron algunos lugareños—, sonaron especialmente bellos, y fueron cantados, los himnos nacionales del país anfitrión y de la Mayor de las Antillas. Y entre algunos cubanos que aquí cumplen misión y gente humilde y hermana del pueblo, Rogelio Polanco Fuentes, embajador de Cuba en Venezuela, acompañado de miembros de la delegación antillana, colocaron en la base del monumento una ofrenda floral a nombre de nuestro pueblo.
Detrás y a lo lejos, majestuosa, ondeaba la bandera de la República Bolivariana de Venezuela. Entonces se escuchó en la voz del delegado Rosmani Porta Limonta el poema El caballo dedicado a Fidel, y en nombre de todos, Flavia Villareal Soler exclamó que la delegación cubana llegaba para ratificar su compromiso con Bolívar y Chávez, y con las buenas causas del mundo. «El CLAE será otro espacio de lucha por la unidad de nuestros pueblos y por ese nuevo mundo mejor que sabemos es posible», afirmó.
Con esa certeza y una carga patriótica incalculable nos despedimos de El Libertador para atravesar todo el parque hasta llegar justamente a la plaza que lleva el nombre del Héroe Nacional de Cuba, y homenajearlo a 124 años de su caída en combate. Allí, también fue depositada una ofrenda floral, se escuchó el canto apasionado de Sandra Ivette Padrón y el verbo encendido de Yosara Acosta Nápoles.
En declaraciones a la prensa, nuestro Embajador expresó que siempre es muy emotivo recordar cómo nuestro Apóstol llegó a Venezuela a venerar a Bolívar. Añadió que tiene tanta vigencia el legado martiano cuando el país, «la Patria donde se inició la gesta independentista de América está siendo asediada por el gigante de las siete leguas del que hablaba Martí, por el imperialismo norteamericano, que pretende socavar la soberanía de la nación.
«Estamos viendo como el pueblo, su Gobierno y el presidente constitucional Nicolás Maduro Moros están demostrando la resistencia y de qué está hecho este pueblo cuando están luchando por impedir que los intentos agresivos y hostiles de Estados Unidos y sus aliados pretenden acabar con los sueños de libertad del pueblo venezolano, que son los mismos de Bolívar y de Martí», significó.
Polanco Fuentes destacó que ese era uno de los motivos por los cuales Cuba estaba en Venezuela con un centenar de estudiantes e invitados para participar en el 18vo. CLAE —que hoy será inaugurado—, pues «a 124 años de la caída en combate de Martí, los pueblos latinoamericanos seguimos más firmes y unidos ante esta arremetida imperial y estamos seguros que fracasaran y nuestros pueblos vencerán», sentenció.
Entonces, en un necesario encuentro con la historia de la nación bolivariana, y antes de llegar al Panteón Nacional donde reposan los restos de Simón Bolívar y otros patriotas de las gestas independentistas de América Latina, Polanco Fuentes sirvió de cercano guía y nos fue adentrando en singularidades del pasado y presente de una nación que afronta una batalla épica por mantener las conquistas y la justicia lograda en estos años.
Así estuvimos frente a la casa por donde en 1881 pasó el hombre de La Edad de Oro, un centro «formador de la infancia» donde dictó clases durante su estancia en esta tierra, y también en el lugar —a pocos metros— que funcionó como Escuela Pública de Primeras Letras y Latinidad de Caracas en la que dio clases el Maestro Simón Bolívar Rodríguez al niño Simón Bolívar entre 1973 y 1975.
Antes esas coincidencias del recinto —que hoy se nombra Casa Nuestra América José Martí—, el Embajador aseguró que «quienes intentan cortar los lazos de hermandad entre Cuba y Venezuela están condenados al fracaso». Y es que ese es uno de los muchos ejemplos que demuestran que la amistad entre las dos naciones tiene una larga historia, como hace 60 años bajo los albores de nuestra Revolución, Venezuela organizó el 3er. CLAE para brindar su apoyo.
Son esas las esencias que se van descubriendo mientras se avanza para llegar hasta el Panteón Nacional. Cuando se entra y nos detenemos ante las impotentes esculturas que se encuentran en ese sagrado lugar el pecho se estremece. Igual nos sucedió, en horas de la tarde cuando visitamos el Cuartel de la Montaña donde descansan los restos mortales del eterno Comandante Hugo Rafael Chávez Frías.
Después de conocer la historia de ese altar de la Patria venezolana, de recorrer sus salas y de presenciar la ceremonia militar de cambio de la guardia de honor, cada uno de los delegados pasó por el sarcófago donde reposan los restos del líder de la Revolución Bolivariana y a la vez contempló el monumento Flor de los cuatro elementos que lo acoge y representa el renacer de la Patria nueva que el Comandante Presidente forjó con los sueños bolivarianos como insignia.
Fue un homenaje sencillo, íntimo y profundo, alejado de todo protocolo, como mismo sucedió a un costado del Cuartel de la Montaña, cuando minutos antes de las 4 y 25 de la tarde —justo a la hora en que Chávez se «despidió» de su pueblo para partir a la inmortalidad y tiene lugar cada día un recio cañonazo en su recordación que le saca las lágrimas a toda la ciudad—, la delegación cubana se reunió para compartir junto a los acordes de Tony Ávila sus canciones.
Fue algo tan singular e impresionante lo que sucedió este domingo desde allí, que estoy seguro que los habitantes de la parroquia 23 de Enero de esta Caracas tan nuestra, tan de todos, recordarán por siempre. La voz estremecedora de nuestros delegados, para evocar al mejor amigo que tuvimos, se unió a ese «acto de memoria pública para recordarle a Venezuela y el mundo que el pensamiento bolivariano, revolucionario, socialista, chavista y antimperialista» que nos legó Chávez se mantiene y la Patria sigue.