Si se ejecuta el traslado, moriría el proceso de paz, ha advertido Saeb Erekat. Autor: Sputnik Publicado: 21/09/2017 | 06:47 pm
RAMALA, Cisjordania, enero 7.— La Organización para la Liberación de Palestina (OLP) condenó este sábado la intención del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de trasladar la Embajada norteamericana en Israel, de Tel Aviv a Jerusalén, lo que supondría avalar la ocupación israelí de la parte palestina de la ciudad.
«Si hace lo que ha dicho, tendremos que dar por muerto el proceso de paz», dijo el secretario general de la OLP, Saeb Erekat, en declaraciones recogidas por la agencia Wafa.
Erekat pidió a EE. UU. «que no lo haga», porque supondría «terminar con todas las oportunidades de paz y reconocer la anexión de Jerusalén», un movimiento unilateral que hizo Israel en 1980 y que no ha sido admitido por la comunidad internacional, reportó EFE.
El dirigente palestino adelantó que la OLP valora cómo reaccionar si Trump cumple, a su llegada a la Casa Blanca el próximo 20 de enero, esta promesa electoral.
Además, el Secretario General de la OLP criticó la votación simbólica que hizo esta semana la Cámara de Representantes de EE. UU. para que se retire la Resolución 2334 aprobada en diciembre por el Consejo de Seguridad de la ONU y que condena la política de asentamientos israelíes en territorios palestinos. Al respecto, extendió una invitación a los miembros de esa Cámara a visitar Palestina y conocer en el terreno los efectos de la ocupación.
Un día antes, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, se había pronunciado de manera similar al calificar la idea de Trump como una «agresión» y «línea roja que no aceptaremos».
Abás alertó que, «de llevarse a cabo (el traslado de la Embajada), entonces el proceso de paz en Oriente Medio e incluso la paz en el mundo estarían en una crisis de la que no seríamos capaces de salir». El Presidente de la ANP invitó a Trump a visitar Palestina el próximo año.
Más firme en sus palabras fue Mahmud al Habash, asesor del Presidente palestino, que calificó la opción como una «declaración de guerra a los musulmanes», según informó el portal digital Ynet.
John Kerry, el saliente secretario de Estado e impulsor de una nueva ronda de negociaciones entre palestinos e israelíes que finalmente fracasó tras nueve meses, en 2014, también se mostró preocupado.