NACIONES UNIDAS, junio 8.— La directora del Centro Nacional de Educación Sexual de Cuba (Cenesex), Mariela Castro, denunció este miércoles durante una reunión de alto nivel de la ONU sobre VIH/sida, el impacto del bloqueo de Estados Unidos en los esfuerzos de la nación cubana para prevenir y tratar la epidemia mundial.
«No nos detiene, pero no puede ignorarse el bloqueo a la hora de abordar nuestras aspiraciones de cumplir la meta internacional de derrotar a la enfermedad para 2030», dijo la sexóloga, quien forma parte de la delegación cubana a la cita en Naciones Unidas, dijó PL.
En tal contexto, Mariela Castro abogó porque el organismo mundial y sus Estados miembros incrementen los reclamos de eliminación de las unilaterales sanciones económicas, comerciales y financieras, en plena aplicación pese al restablecimiento el año pasado de las relaciones diplomáticas entre La Habana y Washington.
La Asamblea General de la ONU instaló en la jornada una reunión de alto nivel para fortalecer el compromiso de la comunidad internacional con la eliminación de la epidemia del VIH/sida.
El foro, que se extenderá por tres días, busca materializar en los próximos años una «vía rápida» para derrotar la enfermedad, que afecta a cerca de 37 millones de personas y que ha causado más de 34 millones de muertes desde 1981.
Como parte también de la delegación de Cuba, el titular de Salud Pública, Roberto Morales, apoyó el respeto al derecho de los seres humanos a la salud y el desarrollo sin mercantilización ni condicionamientos, como un escenario clave para lograr la meta de erradicar el VIH/sida en 2030.
«La salud debe prevalecer sobre cualquier consideración de propiedad material, tecnología e intelectual», comentó, «no resulta aceptable que el precio u otras limitaciones egoístas limiten el acceso universal al tratamiento de las personas con VIH/sida».
Morales fijó la postura de Cuba antes de la adopción en la Asamblea General de la ONU de una declaración política que ratifica el compromiso de los Estados miembros con la eliminación de la enfermedad para 2030.