El acuerdo debe generar intensas discusiones en el Parlamento griego. Autor: ABC Publicado: 21/09/2017 | 06:14 pm
BRUSELAS, julio 13.— Los líderes de la Zona Euro obligaron este lunes a Grecia a hacer importantes concesiones para quedar bajo supervisión externa a cambio de un acuerdo para iniciar negociaciones sobre un nuevo rescate de 86 000 millones de euros que permitirá a Atenas permanecer en esa área monetaria.
Reuters refiere que las condiciones impuestas por los acreedores, tras negociar toda la noche en una Cumbre de emergencia, obligan al primer ministro Alexis Tsipras a renunciar a su promesa de poner fin a la austeridad en Grecia y podrían fracturar su Gobierno de izquierda a causa de disensiones internas y de la indignación pública.
«Claramente la Europa de la austeridad ha ganado», dijo el ministro de Reformas de Grecia, George Katrougalos. «O aceptamos estas medidas draconianas o habrá una muerte repentina para nuestra economía porque los bancos continúan cerrados. De modo que es un acuerdo al que prácticamente estamos obligados», declaró a la BBC.
Si la Cumbre hubiera fracasado, Grecia se habría encontrado al borde de un abismo, con sus bancos cerrados a punto de colapsar y ante la perspectiva de tener que imprimir una moneda paralela y, con el tiempo, salir de la unión monetaria de la UE.
«El acuerdo fue laborioso, pero se consiguió. No hay Grexit», dijo el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. El funcionario rechazó la idea de que Tsipras fuera humillado al aceptar las condiciones, aunque la declaración de la Cumbre insistió en que buena parte de las políticas públicas de Grecia deben ser acordadas primero con los financistas del rescate.
«No creo que el pueblo griego haya sido humillado, ni que los otros europeos hayan perdido el respeto. Se trata de un arreglo típico de Europa», sostuvo Juncker, según Reuters.
Tsipras insistió en que él y su equipo «libraron una dura batalla», pero tuvo que tomar decisiones difíciles.
El acuerdo está sujeto a que Grecia cumpla un estricto calendario y apruebe reformas impopulares sobre el impuesto al valor agregado (IVA), las pensiones y recortes de presupuesto casi automáticos si el Gobierno incumple sus metas fiscales.
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que podría recomendar que el Bundestag autorice el comienzo de las negociaciones para conceder el préstamo a Atenas una vez que el Parlamento griego apruebe el programa y promulgue las primeras leyes.
Las medidas deberán ser proclamadas para el miércoles por la noche y el compromiso, en su totalidad, tiene que recibir aprobación del Parlamento en Atenas antes de que comiencen las negociaciones para el rescate.
Ahora arrecian los problemas domésticos para Tsipras, incluso en Syriza, su propio partido. El ministro del Trabajo, Panos Skourletis, consideró que los términos eran inviables y que darían lugar a nuevas elecciones este año.
ANSA informa que el ex ministro de Economía griego, Yanis Varoufakis, dijo que tenía un plan para su país después del referendo, pero que no fue apoyado por Tsipras, quien, a pesar del triunfo del «No» en la consulta, decidió hacer concesiones.
Tsipras «aceptó el hecho de que no había que insistir con una posición que desafiara a los acreedores», afirmó Varoufakis.
En tanto, el ministro de Defensa griego, Panos Kammenos, anunció que su partido Anel, aliado de Syriza, no apoyará el acuerdo en el Parlamento.