Los soldados bolivianos están detenidos en Chile desde el pasado 25 de enero. Autor: Telesur Publicado: 21/09/2017 | 05:30 pm
LA PAZ, febrero 25.— El presidente de Bolivia, Evo Morales, envió este lunes una carta a los soldados José Luis Fernández, Augusto Cárdenas y Alex Choque, detenidos desde el pasado 25 de enero en Chile por haber cruzado la frontera armados.
Morales escribió la misiva reiterando el respaldo de los bolivianos a los oficiales detenidos y condenó la detención porque a su juicio, es «un acto de venganza política» debido a los reclamos sobre sus derechos de salida al Océano Pacífico, indicó Telesur.
Asimismo insistió en que los soldados cumplían con su «noble deber» de evitar «la comisión de delitos en la frontera, delitos que algunas autoridades chilenas parecen encubrir».
Los tres militares bolivianos seguían a unos contrabandistas de vehículos e ingresaron a territorio chileno para lograr su captura, sin embargo, fueron detenidos y acusados de traspasar ilegalmente y armados el límite bilateral.
El Gobierno boliviano ha recordado que el combate contra el contrabando de coches se ejecuta en conjunto gracias a un tratado firmado por los países. Sin embargo, Morales denunció que los soldados se convirtieron en «rehenes políticos».
Liberan dos soldados en condición de arraigo nacional
En Chile, fueron liberados con arraigo nacional dos de los tres soldados detenidos, mientras que el otro permanece en arresto domiciliario nocturno y arraigo. El proceso judicial contra los efectivos militares continuará en Iquique, al norte del país.
Según Telesur, los uniformados no llegaron a ningún acuerdo con la fiscalía chilena, quien propuso desestimar los cargos contra dos de los tres soldados bolivianos detenidos en el país y realizar un juicio abreviado contra el tercero de los uniformados, iniciativa que fue rechazada por la defensa de los militares bolivianos.
El fiscal Manuel Guerra planteó un «juicio abreviado con tres años y un día de pena para el recluta que portaba arma y munición con expulsión inmediata», según informó Morales al comenzar la audiencia.
«No estamos de acuerdo que haya un procedimiento abreviado. De haber un juicio queremos que sea con las mayores garantías», dijo la defensa después de analizar la oferta.
Los dos soldados libres con arraigo son Alex Choque de 20 años y Augusto Cárdenas de 19 , mientras que José Luis Fernández, de 18, el único de los tres que portaba un fusil FAL al momento de la detención y contra quien cae el mayor peso de las acusaciones, tendrá arresto domiciliario nocturno y arraigo, de acuerdo a lo que dijo el fiscal Guerra.
De esta manera, dos de los uniformados quedaron libres pero con la obligación de no retirarse de Chile, y el tercero debe dormir en un domicilio fijo todas las noches y tampoco irse del país hasta que finalice el proceso judicial.
El canciller chileno, Alfredo Moreno, ratificó la posición de la Casa de la Moneda al señalar que debía resolverse por la vía judicial. Chile sostiene que los uniformados entraron ilegalmente al país portando armas de guerra, de acuerdo a una carta que envió a la Organización de Naciones Unidas en respuesta a las declaraciones del presidente de Evo Morales, quien sostuvo que eran rehenes políticos en represalia al reclamo marítimo del país en instancias internacionales.
Por su parte, el embajador boliviano en la Organización de Naciones Unidas, Sacha Llorenti, destacó en una carta a su secretario general, Ban Ki-Moon, que Chile «vulneró acuerdos internacionales y bilaterales con la detención de los tres soldados al acusarlos de un crimen que no aplica a militares y no haberlo comunicado inmediatamente con el Consulado boliviano después de su detención», como afirma la Convención de Ginebra.
La carta de Evo
A continuación carta textual del Presidente Evo Morales a los soldados bolivianos detenidos en Chile:
Compatriotas y soldados de nuestra Patria, reciban el saludo fraterno de todo nuestro pueblo y de su presidente constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo Morales Ayma, quienes sentimos la más profunda indignación por su encarcelamiento injusto.
Ustedes fueron detenidos cuando estaban cumpliendo con un noble deber de evitar la comisión de delitos en la frontera, delitos que algunas autoridades chilenas parecen encubrir; por ello, los hemos declarado héroes que enarbolan nuestra demanda de retorno soberano a las costas del Pacífico.
Tenemos a todo un pueblo movilizado y compatriotas solidarios que reporchan esta decisión arbitraria desde distintas partes del mundo. Cada día se levantan mil voces bolivianas y latinoamericanas, pero también emergen con coraje las voces chilenas juzgando esta atrocidad que creíamos superada en el siglo XIX.
Compatriotas y soldados de nuestra Patria, su encierro se parece más a un acto de venganza política contra nuestros legítimos derechos, que a una decisión jurídica, en el marco, del derecho internacional público.
Ninguna nación que se pretenda civilizada, encierra a quienes persiguen al delito en la frontera, ningún gobierno ni autoridad aparentemente competente, que se asuma democrático aplica las leyes nacionales a otros estados para juzgar actos nobles que benefician a ambos pueblos.
Sólo conciencias culpables y espíritus tiránicos son capaces de esta descomunal injusticia que viola sistemáticamente la jurisprudencia internacional.
Compatriotas y soldados de nuestra Patria, queremos decirles que el sufrimiento de ustedes y de sus familias, es el sufrimiento del pueblo boliviano. Cada día que dura su encierro o cada día que están condenados a la privación de la libertad, es un tiempo que nos lastima el lama pero a su vez contribuyen a madurar y esclarecer nuestra conciencia frente al atroz y brutal zarpazo que propinaron fuerzas militares chilenas movidas, por sus oligarquías contra nuestra soberanía territorial en 1879.
La invasión chilena que nos arrebato más de 120.000 kilómetros cuadrados y cercenó nuestro corredor natural de acceso soberano al Pacífico.
Hasta hoy los recursos naturales arrebatos a Bolivia continúan alimentando la voracidad geofágica y el espíritu militarista que no se merecen nuestros pueblos.
Las heridas provocadas por la invasión chilena y luego por Tratado de 1904, injusto, impuesto e incumplido son irreparables como lo es este acto ominoso contra ustedes que debe avergonzar a América Latina.
Compatriotas y soldados de nuestra Patria, ustedes deben saber que jamás nuestro pueblo, Gobierno o nuestro Estado, atentaron con el pueblo o el Estado Chileno, los bolivianos son humildes y pacíficos y en muchos casos hemos preferido mantener un silencio prudente ante su arrogancia y su prepotencia.
Somos un pueblo que ama la unidad de nuestros pueblos y por ello estos últimos años nos hemos esforzado en aplicar la Democracia de los Pueblos para superar nuestras diferencias y abogando con franqueza y transparencia.
Compatriotas y soldados de nuestra Patria, el encarcelamiento que ustedes sufren hoy es el mismo al que Chile nos sometió geográficamente en los últimos 134 años.
Ha pasado más de un siglo desde que los bolivianos estamos presos e incomunicados en nuestras montañas. Los Gobierno de Chile prefieren vernos geográficamente te amputados, económicamente débiles y socialmente dependientes, impidiendo nuestro legítimo derecho a ejercer las libertades que otorga el acceso soberano al mar.
Los daños económicos son cuantiosos como irreparables los daños, morales aplicado a un pueblo que sólo dese convivencia civilizada, armónica y solidaria.
De manera unánime los más de diez millones de bolivianos, les decimos que su encarcelamiento nos sólo es injusto, sino también cruel.
No hay mayor crueldad que aplicar esta determinación sabiendo que se están violando los derechos, compromisos de gobierno y el propio derecho internacional.
Nada más oprobioso que conculcar la libertad en aras de de interese políticos subalternos, como es el caso que ustedes enfrentan.
Compatriotas y soldados de nuestra Patria, como Gobierno y junto a nuestro pueblo, nos descansaremos un solo minuto a liberarlos de su encierro, pero también no cesaremos en nuestro empeño para que este atropello sea reparado como corresponde.
Apelaremos a los organismos internacionales, a los tribunales necesarios y a gobiernos amigos, pero en especial, a la conciencia pública del mundo entero para que conozca esta nueva injustica contra ustedes y contra nuestra Patria.
A tiempo de despedirme, quiero expresarles mi admiración por su coraje su extraordinaria valentía para soportar estas horas difíciles.
Siento la misma indignación que siente los millones de hombres y mujeres que creemos que no hay justicia que dure una eternidad ni impunidad que pretenda ser eterna.
Evo Morales Ayma
Presidente Constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia.