Mahmud Abbas, presidente palestino. Autor: AFP Publicado: 21/09/2017 | 05:28 pm
RAMALA, diciembre 22.— «Estamos concentrados ahora en conseguir la completa independencia, y la soberanía del Estado palestino en las fronteras previas a la guerra de junio de 1967, con Jerusalén oriental como capital», declaró el presidente palestino Mahmud Abbas ante la quinta sesión del Consejo Consultivo de Al Fatah.
El reconocimiento de Palestina como Estado no miembro en la ONU es un punto de viraje histórico, y anula la reclamación israelí de territorio en disputa, agregó Abbas en la cita, que se realiza en la ciudad de Ramala bajo la consigna de «Estadidad y legitimidad internacional», reportó PL.
Es un logro histórico porque la tierra palestina devino propiedad de un Estado bajo ocupación, dijo el mandatario de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
Por otra parte, desestimó versiones sobre la formación de una confederación con Jordania. En cuanto al proceso de reconciliación con Hamas, consideró que esa agrupación debe permitir el trabajo de la Comisión Central Electoral en la Franja de Gaza para preparar los comicios presidenciales y del Consejo Nacional Palestino, y afirmó que están en curso contactos en Doha, capital de Qatar, y en El Cairo, Egipto.
En tanto, la Asamblea General de la ONU exigió a Israel este sábado que cese de explotar, dañar, destruir, agotar y poner en peligro los recursos naturales del territorio palestino, incluida Jerusalén Oriental, y del Golán sirio ocupado.
Abbas reafirmó el derecho inalienable del pueblo palestino y de la población de esa parte de Siria sobre sus recursos naturales, incluidos la tierra y el agua y los energéticos.
El pronunciamiento del máximo órgano de Naciones Unidas está contenido en una resolución aprobada el viernes por 170 votos a favor y siete en contra (Israel, Estados Unidos, Canadá, Micronesia, Islas Marshall, Nauru y Palau).
Se abstuvieron El Salvador, Honduras, Panamá, Australia, Papúa Nueva Guinea, Malawi, Camerún, Tonga y Vanuatu. El texto reiteró el reconocimiento del derecho del pueblo palestino a reclamar indemnización por la explotación, daño, destrucción, agotamiento o puesta en peligro de sus recursos naturales como consecuencia de las medidas ilegales de Israel y sus colonos.