Más de nueve mil personas sumaron hasta este domingo sus firmas de respaldo al movimiento de los "indignados" en Honduras, que cobra fuerzas sobre todo en la norteña ciudad de San Pedro Sula, reporta PL.
Medios de prensa nacionales destacan la incorporación de los cientos de miembros del Sindicato de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STENEE), quienes recopilan firmas y colocan cintas verdes en los retrovisores de los vehículos en protesta por las altas tarifas eléctricas.
Los agremiados entregaron un manifiesto favorable a la lucha iniciada por el empresario Roberto Contreras y exigieron revisar los contratos de la entidad estatal con las compañías de generación térmica, porque en su opinión, no se puede seguir cargando al cliente con más alzas.
No se trata de una lucha de grupos, sino por el pueblo hondureño que mes a mes es sacrificado, afirmó el presidente del STENEE en la zona noroccidental, Edson García.
Los "indignados" hondureños están convocados este domingo a una marcha pacífica con pies descalzos desde el antiguo edificio de la Cámara de Comercio e Industrias, de la ciudad de Cortés, hasta la sede de la ENEE, en el barrio El Benque.
La intención es mostrar como las generadoras de electricidad dejaron hasta sin zapatos al pueblo por los altos costos de la energía que le están vendiendo, puntualiza el diario La Prensa.
Contreras mantiene la huelga de hambre iniciada el miércoles anterior, y aunque perdió 14 libras de peso, suda copiosamente y le dan mareos, aseguró que su espíritu está fuerte para seguir luchando por una causa justa.
No queremos entrar en una lucha conflictiva con nadie, sino que se venda la energía a precio justo y razonable, enfatizó.
El gerente general de la ENEE, Roberto Martínez, visitó al huelguista la víspera y expresó la voluntad de buscar una salida favorable a la iniciativa popular desplegada para lograr la reducción de la tarifa energética mediante la producción de energía con recursos renovables.