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NACIONES UNIDAS, octubre 4.— Con una nueva advertencia sobre los peligros del crecimiento de la pobreza en las ciudades, en especial en los países subdesarrollados, la ONU conmemoró este lunes el Día Mundial del Hábitat, ocasión en la que abogó por acciones y políticas que contribuyan a mejorar las condiciones de miles de millones de personas que viven en barrios marginales.
En un comunicado el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo que los llamados pobres urbanos, en su mayoría menores de 25 años de edad, integran los segmentos más empobrecidos y despojados de derechos y están condenados a vivir sin educación ni trabajo decente.
Por su parte, la responsable del Programa de Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat), Inga Björk-Klevby, advirtió que en el tiempo de las dos próximas generaciones, las dos terceras partes de la población mundial estarán radicadas en centros urbanos. Ante esa perspectiva, convocó a incrementar las inversiones en el capital humano, ampliar la inclusión de las personas en la actividad política y cultural y elevar la calidad de la vida.
Según la ONU, América, el Caribe, Europa y Oceanía están altamente urbanizadas con proporciones que oscilan del 70 por ciento en la última al 82 en Norteamérica. Sin embargo, la situación es a la inversa en África y Asia, regiones que este año cuentan con un 62 y un 65 por ciento de sus pobladores, respectivamente, radicados en zonas rurales, frente a un 40 y un 42 en las urbanas.
