NUEVA YORK, julio 09.— La República Popular Democrática de Corea (RPDC) reiteró su disposición de trabajar para esclarecer el hundimiento del buque sudcoreano Cheonan, y su solicitud de poder realizar una investigación con expertos de su país.
«Haremos todo lo posible para llegar a la verdad hasta el final», dijo el embajador norcoreano ante la ONU, Sin Son Ho, en una jornada en que el Consejo de Seguridad de la ONU condenó el ataque que provocó el hundimiento del Cheonan, e instó a los dos países de la península coreana a reanudar las conversaciones de paz, reportó DPA.
El texto, adoptado por unanimidad por los 15 miembros del Consejo, pide la plena adhesión al armisticio que en 1953 puso fin a la guerra de Corea, y anima a que las diferencias en la península se arreglen de manera pacífica y mediante la «reanudación del diálogo directo».
En el Consejo de Seguridad, la RPDC contó con el apoyo de China, uno de los cinco miembros permanentes de esa instancia. El gigante asiático se opuso a criticar a Pyongyang o a aprobar posibles medidas sancionadoras.
Según el embajador Sin Son Ho, los resultados de una pesquisa sudcoreana con el apoyo de otros cinco países (EE.UU., Reino Unido, Canadá, Australia y Suecia), que imputa a Pyongyang como responsable, constituyen «una calumnia» que solo satisface a los intereses de Washington, reportó Telesur.
El diplomático preguntó cómo pudo recuperarse el cuerpo íntegro de un torpedo que supuestamente cortó a la mitad a un gran barco. «Si no hay nada que ocultar, no hay razones para que las autoridades de Corea del Sur no acepten la presencia de nuestros expertos en el lugar de los hechos», dijo.
En mayo, la RPDC anunció el envío a su vecino de un grupo de inspectores y expertos en el área naval y balística, pero no les fue permitido verificar las supuestas evidencias.
Sin Son Ho destacó que su país «está dispuesto a reanudar el diálogo de paz y las negociaciones a seis bandas», entre las dos Coreas, EE.UU., China, Japón y Rusia acerca del programa nuclear norcoreano, informó AFP.
Las negociaciones multipartitas se paralizaron en diciembre de 2008, y en abril de 2009 la RPDC anunció su retirada definitiva de la mesa de diálogo, en respuesta a las sanciones que le impuso la ONU.
Por otra parte, un mensaje de la delegación norcoreana a las conversaciones militares entre Pyongyang y Washington, afirma que «nuestra parte no reparará en la forma ni en el método del diálogo, si este contribuye al esclarecimiento objetivo y científico del incidente del Cheonan», de acuerdo con la agencia de noticias KCNA, citada por PL.
Como las autoridades sudcoreanas rechazan reanudar los contactos militares de alto nivel Norte-Sur, la RPDC decidió prestar atención a la propuesta norteamericana de debatir el caso en las conversaciones bilaterales a nivel de general, y propuso sostener el próximo día 13, en Panmunjon (en la frontera) un contacto de trabajo entre coroneles para establecer los puntos para la apertura de las conversaciones a un mayor rango militar entre las dos partes.