Barcos especializados examinan la zona del desastre. Autor: AP Publicado: 21/09/2017 | 04:56 pm
NUEVA ORLEANS abril 28.— Equipos de emergencia lanzaron este miércoles una operación para realizar incendios controlados que detengan la expansión de un gigantesco derrame de petróleo en el Golfo de México, dijo AFP, tras el hundimiento de una plataforma petrolera perteneciente a la British Petroleum cerca de la costa de Louisiana y de áreas ecológicamente sensibles. Unos mil barriles de petróleo siguen manando diariamente como resultado del siniestro, afirmaron diversas fuentes.
Once trabajadores perdieron la vida en el accidente, cuyas causas aún se desconocen, que ha provocado una enorme mancha negra con un área aproximada de 965 kilómetros, cuya expansión amenaza las playas y áreas pesqueras de los estados sureños de Florida, Alabama y Mississipi.
Los dueños de hoteles y restaurantes, y los pescadores, permanecían nerviosos mientras la mancha se extendía, relató AP.
México, en tanto, está a la expectativa. Citado por IPS, Gustavo Ampugnani, coordinador político de Greenpace para América Latina, consideró que «si se mantienen las proyecciones, la mancha no tocaría las costas mexicanas». Pero ello, dijo, depende de las condiciones climáticas y, si cambian, «produciría un desastre ambiental que México no tiene capacidad de enfrentar», afirmó.
La drástica decisión de encender un fuego en el mar es vista como una intervención necesaria debido a que la gigantesca mancha de petróleo ha avanzado a una distancia de casi 40 kilómetros de los pantanos de Louisiana, precisó el despacho. Sin embargo, muchos temen el impacto negativo que la medida tendrá sobre el ambiente.
Los intentos por frenar dos filtraciones en el oleoducto que conecta la plataforma petrolera con la fuente de origen fallaron, a pesar de los trabajos de cuatro submarinos robotizados, a 1 500 metros de profundidad. Además, se está construyendo una cúpula gigante que podría ser ubicada sobre las grietas para capturar el petróleo, que sería luego bombeado a contenedores en la superficie.
La portavoz de los Guardacostas en EE.UU., dijo que las unidades de respuesta evaluarán cómo han funcionado los primeros incendios antes de intentar una operación más amplia.
Observadores califican ya el accidente como un desastre ecológico, y no pocos auguran que si no se logra sellar la salida de crudo, este podría terminar siendo uno de los derrames más significativos en la historia de Estados Unidos, apuntó Telesur.