BELFAST, Irlanda del Norte.— La Fuerza de Voluntarios del Ulster (UVF), uno de los dos grandes grupos paramilitares probritánicos de Irlanda del Norte junto con la Asociación para la Defensa del Ulster (UDA), anunció este sábado que ha completado su proceso de desarme, cumpliendo así con la petición que se les había hecho después de que el Ejército Republicano Irlandés (IRA, independentista) se deshiciera de su arsenal hace cuatro años.
Según el diario español El País, otro grupo paramilitar, el Comando Mano Roja (RHC), también ha confirmado que se ha deshecho de todo su armamento.
La cúpula de la UVF ha explicado su decisión, que se ampara en una amnistía acordada con el gobierno británico, para «aumentar el establecimiento de un gobierno democrático en esta región del Reino Unido, para eliminar el pretexto de que las armas de los “lealistas” (leales a la Corona inglesa) son un obstáculo al desarrollo de nuestras comunidades y para aumentar nuestro legado de integridad en el proceso de paz».
El pasado 18 de junio, el jefe de la Policía norirlandesa, Hugh Orde, ya anunció que los paramilitares habían empezado su desarme después de que la noticia se filtrara a la prensa. La UVF fue una de las facciones pro británicas más sanguinarias y se le atribuyen más de 500 asesinatos.
El brazo político de este grupo, el Partido Progresista del Ulster, del fallecido David Ervine, apoyó los acuerdos de paz de Viernes Santo de 1998, para el establecimiento de un gobierno de poderes compartidos entre pro británicos protestantes e independentistas católicos, y la aceptación de que cualquier modificación futura al estatus de Irlanda del Norte (bien su mantenimiento como provincia del Reino Unido, bien su independencia e integración en la República de Irlanda) debía pasar por la voluntad popular expresada en las urnas.