BRUSELAS, septiembre 1ro.— La Unión Europea exigió el lunes a Rusia que se retire de Georgia y respete la «integridad territorial» de este país, tras una cumbre extraordinaria en la que los líderes europeos condenaron la que dijeron fue una «reacción desproporcionada» por parte de Moscú en el conflicto creado a raíz de la invasión de Georgia a Osetia del Sur a principios de agosto.
Según EFE, el jefe de Estado francés, Nicolas Sarkozy, que ejerce la presidencia de turno de la UE, anunció que viajará a Moscú y Tiflis el lunes próximo, acompañado del alto representante comunitario de Política Exterior, Javier Solana, y del presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, para verificar el cumplimiento íntegro del plan de paz negociado a mediados de agosto.
Se trata, en particular, de garantizar la salida rápida de las fuerzas rusas que todavía ocupan puestos de control en territorio georgiano, así como de abrir el camino a una «discusión internacional» sobre la estabilización de las regiones de Osetia del Sur y Abjasia.
En la declaración aprobada de forma unánime por los 27, se exige que las fuerzas militares rusas que aún no se han retirado a las líneas anteriores al comienzo de las hostilidades «lo hagan sin demora».
Por otra parte, los europeos decidieron abrir un minucioso proceso de reevaluación de sus relaciones con Rusia, de ahora a la cumbre bilateral prevista para el 14 de noviembre en Niza, Francia.
Según BBC, los gobernantes de la UE acordaron suspender las conversaciones sobre un nuevo acuerdo de cooperación con Moscú, hasta el retiro de las tropas rusas de Georgia.
El presidente de la Comisión, Durao Barroso, precisó que «no se puede continuar como si nada hubiera pasado», aunque dicha postura olvida que la UE recibe de Rusia buena parte del gas y el petróleo que utiliza, y que un congelamiento en ese sentido afectaría grandemente a los 27.