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ORURO, Bolivia.— El presidente boliviano, Evo Morales, calificó como nueva provocación de Estados Unidos la entrada ilegal a su país de una ciudadana norteamericana, con cinco cajas de municiones de calibre 45, cada una de cien proyectiles.
En un acto en la localidad de Turco, el mandatario ofreció detalles de la detención en la terminal aérea internacional de El Alto, el pasado miércoles, de la joven estadounidense Donna Thin, quien traía en su equipaje el armamento, dice PL.
En ese sentido, Morales se cuestionó la gestión de la misión diplomática de Washington en La Paz, y afirmó que la entrada ilegal de armas es una nueva forma de terrorismo.
Sobre este hecho, el embajador estadounidense en Bolivia, Philipp Goldberg, afirmó que se trató de un error «inocente» y «administrativo», argumento que las autoridades locales consideran poco convincente.
Morales explicó que algunos se oponen al cambio en Bolivia y señaló que no es la primera vez que su gobierno enfrenta este tipo de incidentes, en los cuales están involucrados ciudadanos estadounidenses.
El Jefe de Estado recordó que en marzo del pasado año, otra persona colocó explosivos en céntricos moteles de La Paz, con saldo de dos muertos.
Sobre la estadounidense recientemente detenida, el ministro de Gobierno (interior), Alfredo Rada, precisó que Thin declaró que las municiones fueron solicitadas por el jefe de seguridad de la embajada estadounidense en esta nación, James Cambell, el cual —aseveró Rada— ya fue convocado para que explique este hecho.
