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Los mandatarios de Venezuela, Brasil, Bolivia, Chile y Uruguay sostienen vasijas con una bebida tradicional durante la escenificación de un ritual indígena. Foto: AP
COCHABAMBA, Bolivia, diciembre 9.— Solidaridad y cooperación son dos de los conceptos que sobresalen en la Declaración de Cochabamba, rubricada este sábado por los dignatarios participantes en la Segunda Cumbre Sudamericana de Naciones. Al hacerlo, colocaron una piedra fundamental del proceso de integración, estimó PL.
La construcción de la Comunidad Sudamericana de Naciones —afirma el texto— busca el desarrollo de un espacio integrado en lo político, social, cultural, económico, financiero, ambiental y en la infraestructura. No es solo necesaria para resolver los grandes flagelos que afectan a la región, como son la pobreza, la exclusión y la desigualdad social persistentes, convertidas en preocupaciones centrales de todos los gobiernos nacionales, sino que además, es un paso decisivo para lograr un mundo multipolar, equilibrado, justo y basado en una cultura de paz.
Nos planteamos un nuevo modelo de unidad con identidad propia, pluralista, en medio de la diversidad y las diferencias, reconociendo las distintas concepciones políticas e ideológicas, que corresponden a la pluralidad democrática de nuestros países, afirman los dignatarios en la Declaración.
La integración, señala el texto, comprende el ámbito comercial y una articulación económica y productiva más amplia, pero también, nuevas formas de cooperación política, social y cultural, y otras formas de organización de la sociedad civil.
El objetivo último de este proceso es y será favorecer un desarrollo más equitativo, armónico e integral de América del Sur, aseveran los firmantes.
Solidaridad y cooperación en la búsqueda de una mayor equidad, reducción de la pobreza, disminución de las asimetrías y fortalecimiento del multilateralismo, son premisas fundamentales —dice el documento— para las relaciones internacionales del bloque, y principios rectores en el camino de la integración.
Los estadistas se comprometen a respetar la integridad territorial y autodeterminación de los pueblos según los principios y objetivos de las Naciones Unidas, asegurando la prerrogativa de los Estados nacionales a decidir sus estrategias de desarrollo.
La firma de la Declaración puso punto final a una jornada intensa, signada por los encuentros bilaterales. La foto oficial de los ocho dignatarios y cuatro representantes de las otras cuatro naciones miembros de la Cumbre Sudamericana de Naciones (CSN), fue apenas un alto en el programa, comentó PL.
En cada uno de los diálogos, los presidentes Evo Morales (Bolivia), Luiz Inácio Lula Da Silva (Brasil); Michelle Bachelet (Chile), Nicanor Duarte (Paraguay), Bharrat Jagdeo (Guyana), Alan García (Perú), Tabaré Vásquez (Uruguay) y Hugo Chávez (Venezuela), apuntaron hacia la necesaria integración.
También Carlos Serrano (vicepresidente de Ecuador), Daniel Scioli (vicepresidente de Argentina), y María Roque (ministra de Desarrollo Social de Panamá), sostuvieron contactos con similares fines.
Otros encuentros se produjeron entre María Consuelo Araujo (canciller de Colombia), Jorge Champenter (viceministro para Asuntos de Latinoamérica de México), y Rubén Ramírez (canciller de Paraguay) en representación de los presidentes de estos países.
Igualmente se sumaron al llamado de unidad continental los presidentes electos de Ecuador, Rafael Correa, y de Nicaragua, Daniel Ortega, reportó el despacho.
