A pesar de las fuertes medidas de seguridad en Montevideo, hubo manifestaciones como esta. Foto: AP MONTEVIDEO, noviembre 3.— La XVI Cumbre Iberoamericana abrió sus cortinas en el teatro Solís de la capital uruguaya bajo el signo de la voluntad de unidad y el optimismo en el cumplimiento de los compromisos asumidos por la comunidad desde 1991.
Mucho es lo que hemos hecho desde Guadalajara, México, pero mucho es lo que podemos hacer al servicio de un mayor bienestar de nuestros pueblos y ciudadanos, expresó el Rey Juan Carlos de Borbón en la jornada inaugural del encuentro, señaló PL.
El titular de la Secretaria General Iberoamericana (SEGIB), Enrique Iglesias, aseguró que esta reunión sirve de escenario a un diálogo franco y abierto para encontrar consensos y evaluar disensos, para contribuir a hacer reales las esperanzas de un mundo mejor y necesario.
Iglesias aseguró que después de un año de labor de la SEGIB existe un espacio real convertido en mecanismo de concertación, de apoyo en el enfrentamiento de desafíos y en la solución de problemas de seguridad, energéticos, de las economías y el desarrollo sostenible.
Tonos similares tuvieron las palabras del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, y del presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, quienes completaron los cuatro oradores de la jornada inaugural de la Cumbre, antes de asistir a la acostumbrada velada cultural.
Este sábado los dignatarios o sus representantes a la cita regional, examinarán los documentos principales preparados desde el lunes anterior por los coordinadores nacionales, responsables de cooperación y los cancilleres.
Hace unas horas los jefes de diplomacia dieron el visto bueno a los proyectos de Declaración Final, del Compromiso de Montevideo y de nueve Comunicados Especiales.
Unos de los puntos clave de los documentos radica en la defensa al multilateralismo, el respeto a la Carta de Naciones Unidas, el rechazo a las medidas coercitivas unilaterales y la necesidad de luchar contra todas las manifestaciones de terrorismo.
El rechazo al bloqueo de Washington contra Cuba y a la decisión de Estados Unidos de construir un muro en la frontera con México figuran entre los pronunciamientos más destacados de la cita, de conjunto con la oposición a medidas discriminatorias en el tema de los emigrantes.
La cita de Iberoamérica cuenta con la presencia de 15 jefes de Estado o Gobierno, cuatro vicepresidentes y dos cancilleres en representación de las naciones integradas a ese movimiento.
«La construcción de muros no detiene la migración indocumentada, el tráfico de migrantes ni la trata de personas», sino que «incita a la discriminación y la xenofobia, y favorece la aparición de grupos de traficantes que ponen en mayor peligro a las personas», dice el documento.
La Cumbre analiza, además, los problemas de las migraciones y el desarrollo, así como otros temas de interés regional.
El vicecanciller cubano, Abelardo Moreno, manifestó a PL que el texto del Compromiso de Montevideo denuncia la adopción de pasos unilaterales para privilegiar o discriminar a grupos determinados de inmigrantes, como referencia a la Ley de Ajuste Cubano del gobierno de Estados Unidos.
Este documento establece la oposición a las medidas restrictivas a los inmigrantes en relación con sus familias y hace un llamado a la cooperación internacional y al multilateralismo.