Inició el año y la primera gran feria mundial de nuevas tecnologías, CES 2018, permitió echar un vistazo a los proyectos de las empresas líderes del sector
Lo habíamos adelantado como parte de lo que se podía esperar para este año —y a corto plazo—, en materia de nuevas tecnologías: los asistentes de voz están de moda.
Así quedó demostrado en la recientemente concluida Feria Electrónica de Consumo (CES, por sus siglas en inglés), celebrada en la ciudad estadounidense de Las Vegas del 9 al 16 de enero.
Google Assistant y Amazon Alexa fueron los grandes triunfadores de esta feria expositiva, pues estuvieron en todas partes y mostraron sus potencialidades.
El diario argentino La Nación narró que «OK, Google», fue la frase más repetida durante esta edición del CES. La compañía detrás de este asistente de voz lo ubicó en numerosas pantallas de la ciudad para que los transeúntes pudieran interactuar con sus numerosas opciones.
Amazon, por su parte, tampoco fue menos, y pudo dar a conocer los avances de Alexa, precisamente a un año de su eclosión, pues este asistente digital se popularizó en la anterior edición de la Feria.
Otros temas de especial interés fueron los avances en conectividad y redes 5G, los autos autónomos, los cerebros electrónicos, pantallas gigantes 8K y nuevos modelos de computadoras.
No solo Google y Amazon desarrollan asistentes de voz inteligentes prestos a ser insertados en cuanto dispositivo exista.
LG, por ejemplo, presentó una nueva marca, ThinQ, corporizada en un parlante que puede recibir instrucciones de sus dueños para controlar acondicionadores y purificadores de aire, televisores, luces, lavadoras, termostatos y aspiradoras.
La empresa china Lenovo hizo también su aporte con una pantalla inteligente en tamaños de ocho y diez pulgadas, la cual incorpora a Google Assistant y cuenta con una pequeña bocina.
Este Smart Assistant, como lo llama Lenovo, identifica los comandos de voz y puede reproducir una lista de música, películas, consultar la agenda y hasta controlar dispositivos externos en el hogar conectado, según reportes de Xataka.
A Google también se sumó Sony con productos para el hogar y unos auriculares a prueba de agua que tienen al asistente de voz incorporado.
Bixby es el nombre del asistente virtual de Samsung, el cual viene de serie en sus modelos de teléfonos inteligentes Galaxy S8 y Note 8. La multinacional de origen sudcoreano anunció que sumaría a Bixby a televisores, refrigeradores, lavadoras y hasta vehículos.
Asimismo, junto a una aplicación llamada SmartThings, Bixby puede funcionar en la familia de relojes inteligentes de Samsung, y permite controlar todos los equipos del hogar.
Todos estos «cachivaches» apuntan a una transformación radical del entorno hogareño. No porque los asistentes virtuales sean una novedad —Siri, de Apple, hace tiempo que reconoce la voz y ejecuta órdenes, por solo mencionar un ejemplo—, pero ahora la capacidad de escucha está a la par de la que tienen para hablar.
Imaginemos entonces que aquellas personas que viven o pasan mucho tiempo en soledad tienen ahora a su disposición la posibilidad real de establecer conversaciones con estos equipos. Y aunque nada suple el intercambio real entre los seres humanos, al menos las nuevas tecnologías exploran con más fuerza alternativas no solo para mejorar la vida, sino la experiencia de socialización con las máquinas.
Lyft fue una de las empresas que mostró sus avances en cuanto a vehículos autónomos en CES 2018, con recorridos sin conductores por toda Las Vegas.
La publicación especializada Mashable refiere que la experiencia a bordo de uno de estos autos es «aburrida», aunque matiza que ese es el punto: manejar es aburrido, y Lyft logra que la inteligencia artificial que controla el vehículo se comporte como lo haría cualquier humano al timón, solo que sin los errores que este cometería.
Intel, Nvidia y Qualcomm mostraron igualmente el desarrollo de su respectivo software para autos, mientras que Nissan presentó a Leaft, un modelo ya en venta en Estados Unidos que resalta por ser de tipo familiar y se aleja de los conceptos futuristas de otras compañías.
Ya que hablamos de futuro, la empresa Byton mostró un prototipo de coche autónomo que cuenta con el respaldo de empresas como Tesla, BMW, Apple y Google, y se espera sea presentado el próximo año.
Más allá de las carreteras se alzaría el Volocopter, de Intel, un dron gigante de ocho rotores capaz de transportar a dos personas, tal y como se mostró en el CES por parte de la compañía tecnológica.
Los drones, y en general la robótica, también tuvieron su trozo de protagonismo en la Feria, y las empresas presentaron soluciones para brindar asistencia en hoteles, supermercados y restaurantes: servir comida, llevar las compras y trasladar equipaje podría ser un trabajo para las máquinas en el futuro cercano.
Intel y Qualcomm anunciaron en sus conferencias que las redes 5G, nueva generación de velocidad de transmisión de datos para la red de telefonía celular, estarían listas para 2020.
El sector móvil, sin embargo, no tuvo tantas novedades, aunque Sony presentó nuevos modelos de la línea Xperia, LG adelantó su V30 Signature Edition, un terminal con cuerpo de cerámica, y Razer —compañía conocida por su hardware para computadoras—, hizo lo suyo con Razer Phone, un teléfono de alta gama con una pantalla de 5,7 pulgadas y procesador Snapdragon 835, que puede convertirse en el cerebro de una laptop también diseñada por esta empresa, con solo conectarlo a una bahía especialmente preparada para ello.
En cuanto a computadoras portátiles, Qualcomm fue la estrella de la feria con su nuevo procesador 835, basado en la arquitectura ARM, que mejora el consumo de batería y ofrece más de 20 horas de carga. Muchos de los socios de Qualcomm, entre los que se destacan Acer, Asus, Lenovo y HP, mostraron portátiles con este procesador.
Otros equipos lucieron los nuevos y potentes procesadores Intel Core i7 de octava generación, y también los recién presentados AMD Radeon Vega con procesador de gráficos integrado. Todo ello en medio del escándalo mediático generado por las graves fallas que representan las vulnerabilidades conocidas como Spectre y Meltdown.
Si los móviles no lucieron en la Feria, sí lo hicieron los televisores. Samsung tiró la casa por la ventana y acaparó todas las miradas con The Wall (la pared), un televisor con una pantalla de 146 pulgadas (3,7 metros en diagonal), con tecnología MicroLED y resolución 4K.
No menos atención atrajo la pantalla enrollable de 65 pulgadas de LG, compañía que viene desarrollando esta tecnología desde 2017. El nuevo televisor «de papel» tiene una resolución 4K y tecnología OLED.
Sin embargo, en el futuro cercano la alta resolución se duplicará hasta los 8K, (7 680 x 4 320 pixeles), algo de lo que muchas empresas de tecnología, como Sony, LG, Samsung y Panasonic, hicieron gala en esta feria.