Los restos de nuestro Héroe Nacional José Martí, caído en combate el 19 de mayo de 1895, en Dos Ríos, fueron sepultados en cinco ocasiones, hasta que en 1951 se colocaron en el sitio donde hoy reposan
Los restos de nuestro Héroe Nacional José Martí, caído en combate el 19 de mayo de 1895, en Dos Ríos, fueron sepultados en cinco ocasiones, hasta que en 1951 se colocaron en el sitio donde hoy reposan, en el cementerio de Santa Ifigenia.
Un día después de finalizada la batalla, el cadáver fue enterrado en una fosa en Remanganaguas. Luego, ante las dudas surgidas alrededor de la muerte del Maestro, se desenterró para aplicarle la autopsia.
Tras la confirmación, se ubicó en el nicho 134 de la Galería Sur, en el camposanto de Santiago de Cuba (27 de mayo de 1895). Cuando el gobierno interventor norteamericano ordenó demoler los antiguos nichos, se levantó un templete, que se convertiría en su nuevo sepulcro (24 de febrero de 1907).
Con la decisión de construir un mausoleo hubo que trasladar los restos hacia el Retablo de los Héroes (8 de septiembre de 1947). La definitiva morada quedó inaugurada el 30 de junio de 1951. La obra de forma hexagonal (del arquitecto Joaquín Benavent y el escultor Mario Santi) guarda en su interior una urna de bronce cubierta con la bandera cubana.