El primer ministro japonés, Shinzo Abe, reiteró el interés de reforzar los vínculos con Estados Unidos en todos los campos, según informaciones de la televisora NHK.
La posición del jefe del Gobierno incluye un aumento de las relaciones de mutua confianza, entre ellas la reorganización de las fuerzas militares de Washington en el país del Sol Naciente.
En ese sentido, tanto la NHK como otros medios de prensa mencionaron la situación en le prefectura de Okinawa, donde Estados Unidos ubica cerca del 70 por ciento de sus bases militares en Japón.
Dicho territorio, reintegrado a la soberanía japonesa en 1972, fue escenario de protestas multitudinarias que incluyeron al Gobierno de la prefectura con denuncias por el comportamiento de los militares estadounidenses. Al respecto, condenaron la violación de una joven, la golpeadura a un adolescente y los crecientes daños al medio ambiente por las operaciones aéreas, sobre todo de los aviones Osprey.
Las denuncias sobre esos aparatos tomaron en cuenta que han sido causantes de al menos tres acccidentes fatales en la zona con detalles no divulgados, tanto por fuentes de Defensa del Japón como de Estados Unidos.