Ex primer ministro Naoto Kan. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:21 pm
TOKIO, mayo 28.— El Estado tiene «la responsabilidad principal en el accidente nuclear de Fukushima», dijo el ex premier japonés Naoto Kan, al declarar ante la comisión parlamentaria de investigación sobre el caso.
La comisión investigadora se ocupa de reconstruir las causas que están en la raíz de la crisis atómica que se desencadenó tras el sismo y el tsunami del 11 de marzo de 2011 en Japón, dijo ANSA.
En las indagaciones sobre los hechos, se incluyen valorar las medidas adoptadas, los efectos de contaminación radioactiva y la gestión de la operadora de la central de Fukushima, la Tokyo Electric Company (Tepco), agregó PL, y según esta agencia el ex primer ministro confirmó que la adopción de medidas resultó improvisada en la mayoría de los casos y no hubo claridad en los informes técnicos.
Las consecuencias del sismo y el tsunami representaron pérdidas económicas estimadas en más de 300 000 millones de dólares, cerca de 30 000 muertos y desaparecidos y el cierre de los 54 reactores nucleares del país.
De acuerdo con AP, en su testimonio Naoto Kan afirmó: «Me sentí atemorizado e indefenso. Uno no espera que un primer ministro o un ministro de gabinete sea experto nuclear, por lo que necesitamos que funcionarios reguladores proporcionaran su conocimiento y nos ayudaran. No tuvimos a esas personas».
En la planta Fukushima tres reactores se fusionaron tras el sismo de 9,0 de magnitud y el tsunami subsiguiente del 11 de marzo de 2011, y ante el desastre Kan agregó que tuvo que utilizar una ley de preparación para siniestros, establecida en 1999 después de un fatal accidente en una planta de procesamiento de combustible nuclear, que nunca contempló fugas de radiación de gran magnitud y accidentes severos que requerirían la evacuación de cientos de miles de personas, como en Fukushima.
«Todo lo que se preveía en la ley era inadecuado, y tuvimos que sufrir todo tipo de problemas», dijo. Por ejemplo, el centro de manejo de crisis afuera de las instalaciones de la planta no contaba con protección contra radiación ni con un sistema de energía eléctrica de respaldo y tuvo que ser abandonado, añade la información de AP.
Kan indicó que funcionarios nucleares enviados por el gobierno y por la empresa que operaba la planta para asesorarlo no fueron útiles, y que él nunca recibió el tipo de información que requería. El principal órgano regulador de Japón, la Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial, fue particularmente incapaz, señaló, según AP.
Coincidentemente, científicos de la universidad estadounidense de Stanford detectaron radiactividad procedente de la catástrofe de Fukushima en atunes rojos ante la costa de Estados Unidos, reportó DPA.
Los atunes pescados en agosto de 2011 ante la costa de California tenían una mayor carga de cesio 137 y cesio 134 que otros peces similares capturados tres años antes en las mismas aguas, según un artículo publicado este lunes en la revista Proceedings de la Academia de las Ciencias de Estados Unidos (PNAS).
En marzo de 2011, el tsunami que afectó a Japón llevó a que se liberaran y vertieran al mar grandes cantidades de radiactividad de la central atómica de Fukushima.
Según el equipo de investigadores de Standford liderado por Daniel Madigan, los valores medidos en los atunes están por debajo del límite de 100 becquereles por kilogramo de pescado establecido por el gobierno japonés.
Sin embargo, el científico Marc-Oliver Aust, del Instituto de Ecología Pesquera de Hamburgo, afirmó que la carga de cesio medida en Estados Unidos no constituye un peligro para el ser humano.
Una comida de pescado de 200 gramos supondría 0,064 microsieverts de cesio 134 y 137. Sólo a modo de comparación, un europeo medio está expuesto a diario a una dosis de 2.300 microsieverts sólo por la radiactividad natural.