Niños como estos son tratados de sacar ilegalmente de Haití. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 04:55 pm
LA PAZ, marzo 17.— Agentes del Ministerio Público boliviano recuperaron a otros cinco niños haitianos que fueron traídos a este país en enero último por individuos de esa nacionalidad implicados en una aparente operación de tráfico humano, según PL.
De acuerdo con el diario cruceño El Deber, tras la operación organizada por la Unidad de Víctimas Especiales, algunos miembros del grupo de haitianos que trajo esos niños a Bolivia son investigados y tres están detenidos por un presunto caso de tráfico y explotación de personas.
Con estos cinco menores de edad, se eleva a 26 la cifra de niños y adolescentes haitianos que ya están bajo custodia de la Defensoría de la Niñez y del Servicio Departamental de Gestión Social (SEDEGES).
Además, otro menor y su madre, llegados de Guyana Francesa, se encuentran protegidos en un albergue, aunque se indagaba todavía sobre la legalidad de sus documentos.
Con él suman 27 los niños haitianos detectados por las autoridades bolivianas, las cuales aseguran que el número total de llegados a la nación altiplánica aún es desconocido.
El fiscal de la Niñez, Octavio Rosales, informó sobre el otorgamiento de la autorización para que el SEDEGES tenga la tutela de los niños y adolescentes haitianos que se encuentran en hogares de acogida.
Con esta potestad, la entidad podrá determinar el destino de ellos, que puede ser su repatriación, la devolución a sus familiares o su adopción, dependiendo del curso posterior del caso.
Entre tanto, el Ministerio Público continúa con la investigación, que se presume durará unos seis meses.
Hasta ahora sólo llegaron a Bolivia dos madres para reclamar a sus hijos y, para las próximas horas, se espera el arribo de un padre más.
La directora de la Defensoría de la Niñez de Santa Cruz, María Rosa Valencia, informó que el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) está trabajando en la reagrupación familiar.
Según Valencia, las madres relataron que desconocían dónde se encontraban sus hijos y, cuando les llamaron por teléfono para avisarles decidieron viajar a recuperarlos.