Kabul, enero 7.— Dos cohetes impactaron este jueves en edificios de un barrio residencial de la capital afgana, mientras que el gobernador de la provincia de Khost y otras siete personas resultaron heridas a causa de una explosión dinamitera, informaron fuentes oficiales citadas por PL.
Ambos incidentes hicieron saltar las alarmas sobre una nueva escalada de violencia en la nación, que vive en guerra desde 2001, luego de que EE.UU. iniciara «la cruzada» contra el terrorismo.
Un portavoz del Ministerio del Interior comunicó que los proyectiles cayeron en el distrito Ocho al suroeste de Kabul, lo cual causó heridas a tres personas. Al mismo tiempo explicó que las fuerzas de seguridad desarrollan una operación de búsqueda en la zona desde la cual se realizó el lanzamiento.
De acuerdo con el despacho, el vocero de los insurgentes, Zabiullah Mujahid, reivindicó el ataque por vía telefónica y explicó que el objetivo era la embajada de Estados Unidos en Kabul.
El incidente debió darle claridad de la situación en la nación asiática a los senadores estadounidenses John McCain, Joe Lieberman, John Thune y John Barrasso, quienes se encuentran de visita en Afganistán, además de que el área donde cayeron los cohetes está situada a unos tres kilómetros de la misión de Washington.
Bashary también dio cuenta de que el gobernador de Khost, Tahir Khan Safari, resultó herido junto con otras personas cuando una bomba estalló dentro del interior del edificio administrativo provincial.
La explosión ocurrió en momentos en que varios funcionarios celebraban una reunión, y causó heridas a siete personas, entre ellas Sabari y un jefe militar provincial.
Precisamente en Khost, provincia fronteriza con la demarcación tribal paquistaní de Waziristán del Norte, siete empleados de la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA) perdieron la vida cuando un suicida vestido con uniforme afgano detonó la carga explosiva que portaba en una base militar estadounidense, el último día de 2009.