África, una de las regiones más castigadas Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 04:52 pm
ROMA, noviembre 10.— La inseguridad alimentaria afecta a 31 países, mientras los precios de los alimentos en naciones pobres importadoras netas de alimentos permanecen «obstinadamente altos», a pesar de una buena cosecha mundial de cereales en 2009, denunció este martes la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
En su informe trimestral Perspectivas de cosechas y situación alimentaria, publicado en vísperas de la Cumbre Mundial sobre Seguridad Alimentaria que tendrá lugar en esta capital del 16 al 18 de noviembre, la FAO precisó que en esta treintena de países se encuentran, con una situación particularmente seria, las naciones de África Oriental, donde la sequía y los conflictos bélicos han llevado a unos 20 millones de personas a requerir ayuda de emergencia.
Así, por ejemplo, se espera que la producción de maíz en Kenya sea un 30 por ciento inferior respecto a la del año pasado, mientras casi 3,8 millones de kenyanos sufren de inseguridad alimentaria elevada o extrema, muchos de ellos en áreas de pastoreo y agricultura marginales, refirió PL.
En Etiopía, el número de personas que requieren ayuda alimentaria de emergencia, se incrementó de 5,3 millones en mayo a 6,2 millones en octubre.
El reporte también indica que aunque los precios internacionales de los alimentos han bajado considerablemente desde sus niveles máximos de hace un par de años, los del trigo y el maíz subieron en octubre y los del arroz de exportación están aún muy por encima de los de antes de la crisis.
«Para los más pobres del mundo, que gastan hasta 80 por ciento de su presupuesto familiar en alimentos, la crisis de los precios todavía no ha terminado», advirtió el director general adjunto de la FAO, Hafez Ghanem.
La Cumbre del Hambre, convocada por esa agencia especializada de la ONU para dentro de ocho días, pretende buscar un amplio consenso sobre la reducción inmediata del hambre, así como alentar la inversión pública y privada en el desarrollo agrícola de los países pobres.