Sharm El-Sheikh, Egipto._El presidente cubano, Raúl Castro, agradeció hoy la solidaridad en la lucha contra el bloqueo estadounidense y advirtió cuánto se puede hacer en solidaridad y cooperación internacional si existe voluntad política.
Al hablar ante Jefes de Estado y Gobierno, y representantes de las 118 naciones miembros de los NOAL en este balneario egipcio, Raúl Castro recordó que Cuba ha sufrido el más prolongado, abarcador y cruel sistema de sanciones unilaterales por parte de un poderoso Estado.
Pese al reclamo casi unánime de la comunidad internacional, el rechazo de su propio pueblo y las promesas de cambio del nuevo Gobierno de los Estados Unidos, la realidad es -enfatizó- que se sigue aplicando, con el máximo rigor hace casi cinco décadas.
Nuevamente expresamos nuestra gratitud por la solidaridad de los países que mantienen la firme posición de demandar el cese inmediato de esa injusta política, cada vez más insostenible moralmente, que multiplica para mi patria los efectos de la crisis financiera y económica mundial.
Aun en esas difíciles condiciones, agregó Raúl Castro, nuestro pueblo ha demostrado modestamente cuánto se puede hacer cuando existe voluntad política en materia de solidaridad y cooperación internacional, particularmente en el ámbito de la salud.
Casi 51 mil colaboradores cubanos trabajan en 98 países para salvar vidas y prevenir enfermedades o contribuir al desarrollo, indicó ante la ovación los presentes en el Maritim Jolie Ville de Sharm El-Sheikh, ubicado en el sur del Sinaí a 500 kilómetros de El Cairo.
Raúl Castro añadió que más de 32 mil jóvenes de 118 Estados, principalmente del Tercer Mundo, estudian gratuitamente en nuestros centros educacionales, el 78% la especialidad de medicina.
Esas cifras -dijo- representan sólo una ínfima parte de lo que pudiera lograrse si el egoísmo diera paso a la cooperación y solidaridad.
El presidente cubano aseguró que sería posible si nos unimos para luchar contra un sistema de explotación y saqueo que tiende a reproducir el subdesarrollo y ampliar la distancia entre un reducido grupo de naciones ricas, con el 20% de la población, y una vasta periferia donde habita el 80% de la humanidad.
Estamos convencidos de que un mundo mejor es posible. En la lucha por conquistarlo, el Movimiento de Países No Alineados está llamado a desempeñar un papel fundamental.