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El mandatario de Ecuador Rafael Correa dijo hoy en la cumbre extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestras América (ALBA), que tiene lugar en Managua, Nicaragua, que la hora que vive Honduras es dura, pero llena de esperanzas porque la oligarquía de ese país tomó el camino del golpe de estado contra Manuel Zelaya como signo de desesperación.
Correa, primer presidente llegado a la nación centroamericana para participar en la cumbre en apoyo a la gestión del presidente hondureño Manuel Zelaya, agregó que la más reciente reflexión de Fidel Castro, titulada «Un error suicida» y publicada esta noche pudo haberla rubricado él mismo por la coincidencia de criterios con el Líder histórico de la Revolución Cubana.
El gobernante sudamericano agregó que le había comentado hace pocos días a Zelaya: «Si confías en tu pueblo nada ni nadie podrá parar el cambio en Honduras», algo que remarcaba en ese instante.
«Los cobardes se someten, los valientes se relevan», reflexionó el mandatario en alusión a la actitud de los soldados golpistas, que se contrapone con la de miles de hondureños que se lanzaron a las calles a defender a su presidente constitucional.
Correa también habló de la urgencia con la que debía reunirse el Grupo de Río, que agrupa a más de 20 países latinoamericanos, para repudiar al gobierno golpista instalado ayer por el Congreso hondureño a espaldas del pueblo y presentando incluso una falsa carta de renuncia de «Mel» Zelaya.
Asimismo saludó a la canciller hondureña Patricia Rodas, «donde quiera que se encuentre», secuestrada por los militares que apoyaron el golpe de estado y expresó que los golpistas están haciendo el ridículo ante el mundo.
Por otro lado llamó a los soldados honorables de aquel país a ponerse al lado del pueblo y a apoyar al Gobierno de Zelaya electo en las urnas y que concluye su mandato en enero de 2010.
