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Hugo Chávez. Foto AP Puede hablarse de un día grande para la Patria grande latinoamericana. Dos presidentes elegidos por sus pueblos tomaron posesión este miércoles con el aval del comprometimiento de servir a todos sus conciudadanos, pero sobre todo a los más humildes.
Hugo Chávez Frías asumió en la Venezuela bolivariana para el período 2007-2013, con el mandato del 63 por ciento de su población de avanzar por los senderos del socialismo y la integración regional, comentaba Prensa Latina.
Daniel Ortega Saavedra ciñó la banda presidencial blanquiazul en la Plaza de los No Alineados Omar Torrijos —nombres que son todo un símbolo— ante la presencia de 15 jefes de Estado, en su mayoría iberoamericanos, y en medio de grandes expectativas de los nicaragüenses que le abrieron nuevamente las puertas al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
En su discurso, el Presidente venezolano ratificó la decisión de nacionalizar sectores estratégicos de telecomunicaciones, electricidad y petróleo, privatizados por gobiernos anteriores, y aseguró que la economía venezolana marcha vigorosa y «más pujante que nunca antes».
Daniel Ortega. Foto: AP Nicaragua tiene un camino difícil por delante, puesto que las políticas neoliberales aplicadas por los gobernantes de los últimos 16 años entregan un país donde el 80 por ciento de los más de cinco millones de sus habitantes viven en la pobreza y la mitad de ellos en la miseria.
El vicepresidente cubano José Ramón Machado Ventura participó al frente de una delegación de la Isla en el traspaso presidencial en Managua, a donde llegó con un «saludo de máxima hermandad al pueblo nicaragüense», confirmando el mensaje solidario y los lazos tradicionales que nos unen a lo largo de la historia.
