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La potente escuadra de Noruega será el primer rival de las cubanas en su regreso a un Campeonato Mundial. Foto EFE Autor: EFE Publicado: 28/11/2019 | 08:49 pm
Cuentan las horas las integrantes del equipo nacional cubano de balonmano para regresar a un campeonato mundial del deporte. Después de culminar en el escaño 23 en la cita acontecida en Dinamarca 2015, no clasificaron a la edición de 2017 en Alemania, y a partir de mañana volverán al concierto mundialista, cuando enfrenten al sólido plantel de Noruega en la primera jornada de la lid que recibirá la prefectura de Kumamoto, en Japón, anfitrión por vez primera de un certamen con presencia de 24 países.
En su cuarta participación en un campeonato de este nivel (Noruega-Dinamarca 1999, Brasil 2011 y Dinamarca 2015), las alumnas de Jorge Coll jugarán en la llave A, además de Noruega, con Holanda, Serbia, Eslovenia y Angola, rivales todos que parecen superiores al elenco antillano, el cual tratará de mejorar su ubicación de hace cuatro años y, con buena suerte y juego eficaz, conquistar su primera victoria de por vida en fase de grupos.
Casi todos los adversarios de las nuestras presumen de mayor participación en justas del orbe y solo Serbia, con tres asistencias —todas sucesivas desde 2013—, las iguala. De hecho, los cinco contrincantes del grupo acudieron a la última edición, donde terminaron en el podio las subtitulares noruegas y las holandesas, medallistas de bronce.
El debut de las insulares más rocoso no podrá ser, pues las noruegas, además de ser las actuales subcampeonas, poseen 19 participaciones y es el país de más metales en la historia de este evento, con diez —3-4-3. Además, son las máximas monarcas en campeonatos europeos —7-3-1, con cuatro cetros sucesivos— y vigentes dueñas del tercer lugar olímpico, nivel en el que se han titulado par de veces.
El duelo siguiente de nuestro país será el lunes ante las serbias, quienes recuerdan todavía aquel segundo puesto conseguido hace seis años en su debut, jugando como sede. Al día siguiente se medirán frente a las tulipanes —con 11 participaciones, un subcampeonato en 2015 y un tercer escaño—, victimarias de las cubanas hace cuatro años, 45-23 durante la fase de grupos, y ocupantes del tercer lugar en el último Europeo de Francia 2018.
El cuarto enfrentamiento ocurrirá el jueves contra las eslovenas, quienes estarán en su sexta lid universal y llegan con un octavo puesto, hace 16 años, como mejor desempeño histórico. Las huestes de Coll rivalizarán en el último compromiso de la llave, el venidero viernes, frente a Angola, el otro equipo al que Cuba ha enfrentado en sus experiencias anteriores, en la penúltima edición, con triunfo para las africanas de 38-23.
Las angolanas le han cogido el gusto a intervenir en certámenes del orbe, pues desde que debutaron en Corea del Sur 1990 no se han perdido ni una edición. Poseen como mejor ubicación un séptimo escaño en Francia 2007 y en campeonatos africanos han sido el mejor país por mucho, con 13 coronas, nueve más que el Congo.
Con las credenciales presentadas por cada conjunto, las posibilidades de las antillanas de clasificar a la fase siguiente son extremadamente difíciles, toda vez que ese privilegio lo tendrán los tres primeros elencos de cada apartado. Para Cuba será muy importante este torneo por la oportunidad que significa enfrentarse a rivales de buena calidad, algunos incluidos en la élite mundial de esta disciplina.
Además de la Isla, que efectuará sus choques en el Park Dome de Kumamoto, en la justa nipona intervienen otros dos conjuntos de América: Brasil y Argentina. Mientras que Francia, ubicado en el grupo B, defenderá un título que ha obtenido dos veces. El campeonato se extenderá hasta el 15 de diciembre.
