La situación actual de la instalación no impide que sigan llegando para Cuba medallas mundiales de manos de los pelotaris cubanos. Autor: Lianet Escobar Hernández Publicado: 30/03/2019 | 07:48 pm
Toda mujer en Cuba ha tenido quince. Cada familia con una jovencita entre sus miembros, aun cuando las condiciones económicas no sean holgadas, se aprieta los cinturones para garantizar que la fecha no pase inadvertida y que la quinceañera disfrute, al menos, del recuerdo de sus fotos.
Sin embargo, la escuela cubana de pelota vasca, es una de esas «mujeres» que no pudo siquiera ser maquillada cuando en 2004 arribó a sus primeros 15 años de vida, y como consecuencia, hoy se muestra añeja, deslucida, lastimada y pidiendo a gritos, más que simples toques de cosméticos, una urgente cirugía plástica.
Una «intervención quirúrgica» que llegará en los próximos meses gracias a un mano a mano sostenido entre el Inder y la Federación Internacional de Pelota Vasca (FIVP).
Ideas, proyectos y acciones
El Complejo Deportivo Comandante Raúl Díaz Argüelles, ubicado en la capital del país, fue inaugurado oficialmente en 1991 durante los Juegos Panamericanos de La Habana, pero antes, en 1989, se había construido la cancha del trinquete para acoger el Mundial Absoluto de la disciplina celebrado en 1990.
Desde entonces, las canchas del centro han sufrido con el paso del tiempo sin que se les prestara la atención merecida, a no ser sencillos y esporádicos trabajos de mantenimiento y un intento en 2007 de rehabilitar la zona dedicada al trinquete, la cancha más ataviada y la que mayores recursos necesita.
«La reparación que se hizo en esa área hace más de diez años no fue la mejor y en la actualidad es muy avanzado el deterioro que presenta, aunque el resto del complejo está igualmente muy menoscabado.
«Ya se reparó el comedor de los atletas para hacer su estancia aquí más confortable, pero la reconstrucción capital que lleva el lugar aún está en fase conceptual», asegura Alejandro Portal García, director de la escuela desde enero de 2017.
No obstante, y según nos aclaró el directivo, es un interés del país recuperar todas las instalaciones que se realizaron con motivo de la cita continental de La Habana.
Al respecto dialogamos con Nuridy Rodríguez Hidalgo, directora nacional de Inversiones del Inder, quien nos comentó la noticia de que «se pretende que las labores de reparación comiencen sobre los meses de julio y agosto, aunque esta es una fecha estimada, pues todavía trabajamos en todo lo que es proyecto ejecutivo.
«Ya tenemos claro lo que se va a hacer, pero ahora estamos en el proceso de la documentación necesaria en conjunto con el Instituto de Planificación Física y en espera de que lleguen los suministros que enviará la Federación Internacional, actualmente muy comprometida con nuestra intención de recuperar el centro», enfatizó Rodríguez Hidalgo.
Afirma la directiva, además, que será una reconstrucción por etapas debido a las dimensiones del lugar, por lo que es posible que no se termine con la totalidad de las canchas y el trinquete este año.
Un granito de arena
Recuperar la Argüelles en toda su extensión es ya una necesidad, de ahí que sea una gran ventaja contar con el apoyo de la FIVP, cuyos directivos, encabezados por el español Xavier Cazaubon, se han manifestado a favor de rejuvenecer el centro brindando toda la ayuda posible.
Ellos deben aportar los materiales específicos que precisan los frontis que no son de producción nacional, como la pintura, el cemento, las luminarias con tecnología led y la malla que debe ser acerada, pues la que se hace en Cuba es plastificada y no aguanta los impactos, explicó la funcionaria.
«El acuerdo es que el Inder pague el costo del proyecto ejecutivo y la mano de obra y la FIVP nos va a ayudar con la importación de los suministros», esclareció Nuridy Rodríguez.
Según el criterio de Lázaro Mendoza Simón, comisionado nacional de la disciplina y presidente de la Federación cubana de este deporte, «la locación recibió la visita de Roberto Elías, un arquitecto argentino que atiende el área de las Américas, que estuvo realizando las mediciones correspondientes para presentar un informe detallado de lo que precisa la instalación en lo que a materiales se refiere.
«Otra de las ideas que defiende la FIVP es la de hacer aquí un centro regional de tecnificación para el área del Caribe, de ahí su interés en apoyarnos, pero eso sería cuando la instalación cuente con alojamiento para los tres deportes que aquí radican, dígase pelota vasca, patinaje y raquetbol», apuntó el máximo rector de los pelotaris cubanos.
Perjuicios y beneficios
Actualmente son muchos los avatares que padecen los atletas dentro de las canchas a la hora de los entrenamientos. Nos cuenta Raúl Montejo, entrenador de paleta con pelota de goma, que el mal estado de las cercas perimetrales hace que los atletas a la hora de buscar una jugada a la malla opten por frenar antes de llegar a la bola, debido a los pinchos que pueden lesionarlos o herirlos.
«Es una situación que limita a los muchachos, sobre todo a la hora de realizar una jugada defensiva, el atleta no aplica la velocidad que debe por miedo a la malla, además, si vas pensando en resguardarte de la cerca no piensas en la pelota y si estás compitiendo pierdes el punto», apuntó el preparador.
Lo otro de las mallas en mal estado es la constante pérdida de las pelotas, ya sabemos que no son muy baratas ni fáciles de adquirir, cuando se escapan por las aberturas de las cercas en muchas ocasiones se pierden, además de que el entrenamiento se ve varias veces detenido para ir a buscar las esféricas.
Es por ello que nadie estaría más satisfecho de que la Argüelles se reanime que atletas y entrenadores, «si esto recibe una reparación capital nos ayuda muchísimo con la preparación para los grandes eventos, se asemejaría a lo que son las canchas a nivel internacional y eso sería una gran alegría para todos», dijo Alejandro González, practicante de la modalidad de paleta de goma.
Dolencias y esperanzas de un patrimonio
El área del trinquete, una cancha que sorprendentemente está inscrita como patrimonio por ser una de las pocas que existe en el mundo, es una de las que más va a agradecer los retoques.
«Es un local al que se le va a sustituir la cubierta, que es lo que presenta daños significativos, pero hay que buscarle una solución a todo el cierre de la carpintería, pues por su valor patrimonial hay que mantenerla con el mismo diseño en su estructura.
«Originalmente ese cierre era de madera, pero el agua, el sol y el tiempo la han deteriorado y por eso estamos valorando en qué sistema lo ponemos que no cambie la fachada. También hay que trabajar los desagües fluviales y construir un sistema de drenajes que evite que el agua se empoce con las lluvias dentro de la cancha, lo que impediría la corrosión de las chapas que sostienen los cristales.
«Se trabajará igualmente en las gradas, se activarán las dos cabinas, los baños, y en el caso de los cristales solo se va a sustituir el que se cayó. Habrá espacio hasta para colocar una cámara de televisión en las competencias», constató la directiva de Inversiones del Inder.
Un coto a las indisciplinas
Otros factores que por años han hecho padecer a la Argüelles son los malos tratos que recibe de manos de quienes no saben apreciar el valor de una instalación deportiva como esta.
Personas que se aprovechan de sus espacios para parquear vehículos o para romancear amparados en la oscuridad de la noche; incluso hay quienes se entretienen escribiendo sobre las paredes mensajes nada halagüeños y están los que llegan con intenciones de divertirse sanamente, aunque estos, por desgracia, son los menos.
«El gran problema del centro es que está dentro del Parque Metropolitano de La Habana y por tanto no está cerrado, porque existen regulaciones urbanísticas que no nos permiten cercar el lugar. Es por ello que vamos a trabajar en reforzar el sistema de iluminación exterior y a redoblar la seguridad y protección del local», puntualizó Rodríguez Hidalgo.
Fue la situación precaria de la instalación la que obligó a la Federación Internacional de Pelota Vasca a no avalar este año la tradicional Copa Capitán San Luis como un torneo foráneo, una decisión que también determinó al organismo cubano a finalmente no celebrar el certamen, único que reúne a los mejores pelotaris de toda Cuba. Esperemos que para el 2020, otra sea la historia.
Estela de recuperaciones
Desde 2016 se comenzaron una serie de obras con el fin de recuperar las instalaciones construidas para recibir los Juegos Panamericanos de La Habana en 1991 y se edificaron otras de igual importancia. Fueron estas:
- El Centro de Investigación del Deporte.
- La Escuela Nacional de Velas.
- El gimnasio juvenil de voleibol del Estadio Panamericano.
- El lobby del Estadio Panamericano.
- Un gimnasio de musculación de atletismo.
- El gimnasio juvenil de boxeo del Estadio Panamericano.
- El Complejo de Piscinas Baraguá.
- El Centro de Información del Deporte.
- La residencia del Cerro Pelado.
- El patinódromo del Complejo Raúl Díaz Argüelles.
- El velódromo Reinaldo Paseiro (aunque falta la pista de competencia).
- La Escuela Nacional de Kárate y Taekwondo.
- La Escuela Nacional de Hockey sobre césped.
- Se colocó la pantalla en el Estadio Latinoamericano.
Y actualmente se trabaja en el canal de remo, la Escuela Nacional de tiro deportivo y la pista de competencias del Estadio Panamericano, lugar al que ya se le reparó la pista de calentamiento.