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La pala masculina estuvo entre lo más atractivo del torneo. Autor: Tomado de Jit Publicado: 27/06/2018 | 03:47 pm
Con el equipo de La Habana encumbrado en la cima del podio por provincias, concluyó en Guantánamo el Campeonato Nacional Juvenil de Pelota Vasca que desde el 21 y hasta el 24 de junio tuvo por escenario las canchas de la barriada de San Justo, en el Alto Oriente cubano.
Al conjunto capitalino le bastaron 42 puntos para llevarse el oro, escoltados por los anfitriones que alcanzaron 34 unidades y por el plantel de Santiago de Cuba que consiguió 30.
Además de las provincias ganadoras, en el certamen se incluyeron selecciones de Mayabeque, Artemisa, Pinar del Río, Ciego de Ávila, Cienfuegos, Granma y Villa Clara, las cuales compitieron en las modalidades de pala individual masculina, frontenis por pareja femenino, y en mano a dúos y en solitario para varones.
Entre las muchachas el título correspondió al binomio del Guaso conformado por Wendy Leydis Durand y Yalieska Leoncio; mientras, la medalla de plata iba al pecho de las giraldillas Loraine Felipe y Milaini Hernández y el bronce era para las indómitas Laura Álvarez y Dasmay Verdecia.
Por su parte, la pala fue dominada por el habanero Dayán Aguirre quien compartió el pedestal de los ganadores con el avileño Yandel Espinosa y el cienfueguero Miguel Enrique Álvarez, medallistas de plata y bronce, respectivamente.
En la mano, la pareja capitalina de Randy Chong y John Linares se coronó campeona, seguido por la dupla santiaguera de Brayán Feijoo y Raúl Méndez; al mismo tiempo, el tercer puesto se reservaba para el dueto de casa compuesto por Luis Lenox Limonta y Edilberto Llibre.
Entretanto, Linares, Limonta y Feijoo, por ese orden, se repartieron las preseas de oro, plata y bronce en la especialidad de mano individual.
El cuadro de honor del torneo contempló como atleta más destacada entre las damas a la local Wendy Leydis Durand, mérito que entre los jóvenes caballeros fue concedido a John Linares de La Habana.
Por último, el mejor árbitro de la justa resultó Javier Andrade Curbelo de Villa Clara; así mismo, la condición de entrenador más sobresaliente recayó en el habanero Orlando Colomina.
