La selección cubana de fútbol cayó por goleada este viernes 4-0 ante la anfitriona Panamá en el estadio Rommel Fernández y no consiguió cupo para la Copa América del Centenario, la cual se disputará este año en varias ciudades de Estados Unidos.
Sin ideas en el mediocampo, acudiendo a pelotazos frontales y con reiteradas desatenciones defensivas no se puede ganar. Los goles panameños fueron obra de Gabriel Gómez, Luis Tejada (penal), Armando Cooper y Blas Pérez. En el partido anterior, en similar pasto, Haití derrotó a Trinidad-Tobago por 1-0.
Por su parte, hoy se inicia en nuestra Isla el llamado torneo de ascenso, que con la presencia de ocho equipos, dará dos plazas para el venidero 98 Campeonato Nacional, para el que ya se preparan los combinados de Camagüey, Villa Clara, La Habana, Guantánamo, Santiago de Cuba, Cienfuegos, Ciego de Ávila y Las Tunas.
Datos brindados por la Asociación de Fútbol de Cuba (AFC) reportan que en el grupo A, con sede en las canchas de Bayamo y Jiguaní, en Granma, se eliminarán el elenco local junto a Sancti Spíritus, Mayabeque y Holguín, mientras que en el B lo harán Isla de la Juventud, Matanzas, Pinar del Río y el anfitrión Artemisa, en el terreno de San Cristóbal.
El torneo se celebrará a dos vueltas, del 9 al 19 del presente mes, con partidos de ida y vuelta. A saber, los ganadores de cada grupo serán los clasificados para el torneo de élite del fútbol doméstico.
Entonces, los jugadores de esos seis equipos perdedores recogerían sus maletas y retornarían a casa con la pálida cota de solo ¡seis partidos! en el año. Sin duda, esa es otra causa de la consiguiente pérdida de muchos talentos en este deporte. Para desarrollarse en el fútbol, hay que jugar, jugar y volver a jugar. Como dicen los buenos entrenadores, «que el niño duerma con el balón al lado de su almohada». ¿Será que tenemos una situación económica tan compleja para que este torneo de ascenso no pueda durar un poco más?