Era de esperar que el cubano Osleni Guerrero amaneciera en el 2015 más cerca del lugar 40 en el ranking mundial de bádminton. Su talento y los beneficios aportados por una beca que le garantiza entrenamiento y la participación en competencias de nivel le han posibilitado desarrollarse en un deporte muy exigente.
Ahora que está en el puesto 43, su mejor ubicación histórica, el muchacho de La Habana no deja de pensar «en grande», que es lo mismo que seguir subiendo en el escalafón y asegurar su asistencia a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Osleni sigue a la cabeza del listado continental, pero sus escoltas inmediatos han cambiado. El estadounidense Sattawat Pongnairat, ya no es el segundo, ni siquiera el tercero. Va cuarto y 65 en el ranking global.
Detrás del cubano, entre los más sobresalientes de América se ubica ahora otro estadounidense, Howard Shu (57), mientras el tercer escaño pertenece a la «pesadilla» de Osleni, el guatemalteco Kevin Cordon (64).
Tras su lesión, Kevin ha vuelto por sus fueros, y el ejemplo más fehaciente fue su victoria en la final de los Juegos Centroamericanos y del Caribe ante Osleni.
Así que el duelo está planteado, y se augura una temporada 2015 de mucha táctica y estrategia por parte de los protagonistas: el cubano, tres estadounidenses, el guatemalteco y un brasileño, Daniel Paiola, el otro del lado de acá del Atlántico que está en el top cien, exactamente ubicado en la casilla 72.
Para acomodarse en la cima continental, el nuestro se inscribió en el Torneo Internacional de Perú, certamen que se efectuará del 19 al 22 de este mes. Luego, vendrá a La Habana para concursar en marzo en el Giraldilla.
Se espera que en la actual temporada Osleni pueda competir en justas de gran linaje, que aumente el roce con las estrellas asiáticas y gane, además, los Juegos Panamericanos de Toronto en el verano, certamen que premiará al monarca con un pasaje directo a Río-2016.