El croata Luka Modric es el último «capricho» de Mourinho. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/09/2017 | 05:24 pm
Con la Eurocopa y los Juegos Olímpicos de Londres como principales vitrinas, el mercado de fichajes del fútbol europeo cerró sus portones en la medianoche del pasado viernes. Y si bien la actual crisis de las economías del Viejo Continente sigue limitando el flujo de jugadores, algunos de sus clubes más poderosos se las arreglaron para abrir sus chequeras y reconfigurar sus particulares «galaxias», de cara a la temporada que acaba de comenzar.
España con su Liga volverá a ser el epicentro mediático gracias al «romántico» duelo Real Madrid-Barcelona, que en su versión particular encierra la lucha entre el portugués Cristiano Ronaldo y el argentino Lionel Messi por la distinción al mejor jugador del planeta.
Mientras, la Liga Premier inglesa repite como la más competitiva, la Bundesliga alemana sigue presumiendo de una fortaleza a prueba de balas, al tiempo que los torneos de Francia e Italia, intentan reconducir sus destinos para volver a codearse con sus «vecinos».
Cosa de dos
Hace mucho más tiempo que el deseado, la Liga española de fútbol se convirtió en un enfrentamiento particular. El «bipartidismo» Real Madrid-Barcelona, con sus subidas y bajadas de ciertos pedestales, continúa siendo abrumador. Sobre la hegemonía futbolística está sustentada la solvencia, y bajo esas premisas continúan las épicas batallas, para las que cada uno, desde su visión, se ha preparado.
Terminada la exitosa era Guardiola, toca el turno a su fiel escudero Tito Vilanova trazar la ruta de la continuidad. Basado en la filosofía gestada en su cantera de La Masiá, el club azulgrana se impuso en cuestiones de gastos e invirtió 34 millones de euros en un par de retoques.
Aunque no se dio la cacareada salida del lateral brasileño Dani Alves, se curaron en salud con la compra al Valencia del internacional Jordi Alba (14 millones). Ante la partida del maliense Seydu Keita y con Puyol cada vez más asiduo a las enfermerías, se decantaron por el camerunés Alex Song (19), un «todoterreno» traído desde el Arsenal inglés para taponar cualquier fisura del medio hacia atrás.
En la otra trinchera el técnico portugués José Mourinho aprobó la venta de Granero al Queen’s Park Rangers inglés, de Altintop (3,5) al Galatasaray turco, así como de Fernando Gago (9) y Sergio Canales (8) al Valencia. De paso, cedió al alemán Sahin al Liverpool para, con los fondos recaudados, hacer espacio a su último capricho: el croata Luka Modric (30). Y a última hora se montó al tren «blanco» el ghanés Michael Essien, cedido por el Chelsea para tapar la salida del francés Lass Diarra hacia el Anzhi ruso.
De los que pelean por el tercer puesto no hay mucho por decir. Además de las adquisiciones al Real Madrid, el Valencia invirtió en el lateral portugués Joao Pereira (3,6), mientras que el Málaga, metido en enredos financieros, envió hacia el Arsenal inglés a Cazorla (15) y a Rondón (10) al Rubin Kazan ruso, y suplieron el retiro del holandés Van Nilsteroy con la «repesca» del argentino Javier Saviola y del paraguayo Roque Santa Cruz para apuntalar su estreno en la Liga de Campeones.
A su vez, el Atlético de Madrid, flamante campeón de la última Súper Copa de Europa, sumó sin gastos a Cristian, «Cebolla», Rodríguez.
Los ricos del norte
Como el fútbol se parece a la vida, no podía ser otra que la Liga Premier inglesa la más solvente y emprendedora, y los 313 millones de euros gastados por sus equipos en la «feria estival» contrastan con los apenas 63 invertidos por los clubes españoles.
El Manchester City, ganador tras 44 años de espera, solo se fijó en el talento del joven mediocampista Rodwell (15 millones) para traerlo desde el Everton, pero a última hora reforzó su defensa con el brasileño Maicon (9).
Parece muy sólido el imperio futbolístico construido con los petrodólares del jeque Mansour bin Zayed, miembro de la familia real de Abu Dabi, pues una vez más el técnico italiano Roberto Mancini contará con la pólvora de Balloteli, el «Kun» Agüero y Tévez, con las finesas de Silva y Nasri desde el mediocampo, y la seguridad en la zaga de Lescott, Kolarov y Kompany.
Para enfrentar semejante poderío Sir Alex Ferguson, el eterno estratega del Manchester United, convenció al artillero holandés Robin van Persie (30,6) de que su mejor destino era vestir del «Diablo Rojo». Del Borussia Dortmund alemán se trajeron al volante japonés Shinji Kawama (17), un buen candidato para abastecer la sed goleadora de su nueva joya y la del temible Wayne Rooney.
Por su parte, el triunfo del Chelsea en la pasada Champions le soltó aun más —si esto fuera posible— la mano al magnate ruso Roman Abramovich, dispuesto a mantener lo que tanto le ha costado. A la partida de Anelka, Drogba, Kalou y Bosingwa, el «Boss» respondió con las contrataciones del alemán Marko Marin (8 millones), del brasileño Oscar (31,2) y el belga Eden Hazard (40).
Un paso por detrás va el Arsenal, otra vez aquejado por la fuga de talentos. Para contrarrestarla llegó el español Cazorla, mientras que el regreso de Arshavin alivia el golpe. Además, se visten ahora de «gunners» el alemán Podolski (13) —antes del Colonia— y el francés Giroud (15), proveniente del Montpellier.
La distinción germana
No hay torneo en el continente más sólido que la Bundesliga alemana. Clubes con un esquema financiero saneado, equipos pujantes y estadios siempre llenos. Dicen que allí una semana se le puede ganar al primero de la tabla y en la siguiente perder con el último, y la variedad de opciones la prueban los cuatro campeones de las últimas seis temporadas.
Sin embargo, dos equipos están en boca de todos: el joven y ambicioso Borussia Dortmund, campeón defensor, y el siempre candidato Bayern de Múnich.
Como hace un año con la estampida de Sahin hacia Madrid, el Borussia tendrá que reponerse de la salida del japonés Kawama. Sigue como referencia de la formación del técnico Jürgen Klopp el delantero Mario Götze, el mejor jugador joven de Europa en 2011. A su vez, el traspaso del nipón dejó las monedas suficientes para contratar al internacional Marco Reus (17,5 millones), el jugador más sobresaliente del pasado campeonato.
En cambio, los bávaros «reventaron» el mercado veraniego al llevarse del Athletic de Bilbao español al mediocampista Javi Martínez (40), por ahora la adquisición más cara en la historia de la Bundesliga.
La clase media, siempre con opciones, la encabeza un Schalke 04 que extrañará al ídolo español Raúl —ahora asentado en Qatar—, pero sigue teniendo al holandés Huntelaar como garantía de gol. Para quedarse, el ariete pidió compañía, y entonces llegó su compatriota Afellay desde Barcelona en calidad de préstamo.
A ese mismo nivel aparece el Wolfsburgo, después de rescatar de la sesión al talentoso Diego. Además, ha reforzado su artillería con Bas Dost, máximo goleador de la Liga holandesa con el Heerenveen, y Olic, descartado ahora por el Bayern.
Italia, Francia, La «Champions»
Es un hecho que, por diferentes motivos, las ligas de Italia y Francia han perdido protagonismo, pero algunos de sus clubes más glamorosos hacen esfuerzos por seguir en la élite del continente.
Algunos problemas extradeportivos han lastrado el calcio italiano, y la crisis económica ha obligado a sus equipos a deshacerse de sus mejores figuras. No obstante, resurge el Juventus, ahora con el artillero danés Nicklas Bendtner en nómina, mientras que el AC Milán intenta plantar bandera, y para ello sacó de Roma al delantero español Bojan y negoció la llegada desde Manchester del holandés Neil de Jong.
En Francia el ejemplo más claro es el París-Saint Germain, que intenta reverdecer laureles a golpe de talonario. Hasta allí han ido a parar jugadores de la talla del defensor brasileño Thiago Silva (65 millones), el delantero sueco Zlatan Ibraimovic, y el también atacante argentino Ezequiel Lavezzi (26), quienes son estandarte del proyecto liderado por el brasileño Leonardo, su director deportivo.
Conseguido el subcampeonato la pasada temporada, los inversores qataríes que reflotaron el equipo parisino centran sus esfuerzos ahora en una buena actuación en la próxima Liga de Campeones, cuya fase de grupos fue sorteada de la siguiente forma: