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En un partido de trámite a pesar de que se discutía la medalla de bronce, Cuba venció este martes a México, seis carreras por cero, y aseguró un sitio en el podio del béisbol panamericano, tras los dos finalistas: Estados Unidos y Canadá.
Ambos equipos enfrentaron el choque con la desilusión a cuestas, después de caer en semifinales el día anterior. Cuba sacó la mejor parte sin batear demasiado, pues bastaron los jonrones de Despaigne, Yulieski y Pito Abreu.
Mientras, el derecho Miguel Alfredo González trabajó bien hasta el sexto capítulo, cuando cedió su lugar en la colina a Yadier Pedroso. Este último cerró el partido y se vio en buena forma, así que definitivamente no relevó frente a Estados Unidos por una fatal decisión técnica.
Así batearon los cubanos frente a México: Castillo (2-0), Bell (3-0), Cepeda (4-2), Despaigne (4-1), Yulieski (4-1), Abreu (4-2), Rudy Reyes (4-3), Pestano (3-0) y Arruebarruena (4-1).
En el ambiente flota ahora la incertidumbre sobre cómo encarar este nuevo fracaso, porque aquí la medalla de bronce no sabe a nada. Veremos si de verdad llega ese análisis profundo, a camisa quitada, que usted y yo esperamos desde hace rato.
Oro para Canadá
En horas de la noche, Canadá superó 2-1 a Estados Unidos y se llevó el título por primera vez, con gran trabajo de Andrew Albers (6,1 entradas) y el relevista Scott Richmond.
Los canadienses marcaron sus dos carreras en la sexta entrada, impulsadas por el cuarto bate James Van Ostrand, ambas frente al abridor estadounidense, Andrew Van Hekken. Ya ven, de golpe y porrazo este torneo se volvió loco.
