Reutilio Hurtado sopló jonrón con las bases llenas en medio de la fiesta. Foto: Franklin Reyes Santiago de Cuba.— Cachumbambé en el pizarrón, jornada de cinco horas y 50 minutos, nuevas imprecisiones tuneras a la defensa, marcador de balonmano y no de béisbol, avispas hicieron la miel en dos entradas: la primera y la octava, en las que, en suma, facturaron 14 carreras.
Este pudiera ser el resumen abreviado del duelo nocturno sabatino que, con agua incluida durante 60 minutos de interrupción, puso a los santiagueros, con su triunfo de 19-11, a las puertas de la semifinal oriental.
A pesar de los 21 indiscutibles tuneros, incluidos cinco jonrones, los actuales campeones supieron, como la noche anterior, «darla a la hora buena» y vencer. Albert Carrión fue el ganador y Jesús Guerra resultó el perdedor en el maratónico desfile de 11 lanzadores entre los dos bandos.
Justo a las 11 de la noche, un estribillo colectivo, a ritmo de conga, contagiaba la ciudad: «Tienes que saber que a Santiago se respeta». Esa misma voz seguramente llegará mañana a Las Tunas para el choque que pudiera decidir el clasificado en este duelo netamente oriental.