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La capitalina Dayana Ferrer es la «pimponista» cubana más veterana en los Juegos del ALBA. Fotos: Franklin Reyes, enviado especial
BARQUISIMETO, Venezuela.— Ana Ivis Quiñones, con 16 años de edad, es la atleta más joven del equipo femenino cubano de tenis de mesa que debuta hoy en los II Juegos del ALBA.
Ella, como es lógico, busca fogueo en este evento, donde no están nuestras principales figuras. Me refiero a Glendys González, actual titular nacional, así como Anisleivis Bereau y Heilyn Trujillo, quienes compitieron hace unos días en el certamen prePanamericano, celebrado en Brasil, y en un torneo Pro Tour, en Chile.
Así, la más veterana de nuestras pimponistas aquí es la capitalina Dayana Ferrer, de 24 años, quien ganó tres medallas de oro hace dos años en la primera edición de los Juegos del ALBA.
Sandra Mustelier (18 años) y Mainedis Paradelo (21) completan la escuadra que tiene el propósito de conquistar esta vez todos los títulos, según nos confiesan los entrenadores Reinier Vázquez y Daniel Guzmán.
Aleidis Justis, uno de los bisoños que busca fogueo. Entre los varones también nos representará en esta cita un equipo joven, integrado por Alejandro Rodríguez (20 años), Aleidis Justis (20), Joan Mora (19) y Moisés Campos, el benjamín del grupo con apenas 15 abriles.
Pero tampoco se trata de nuestra selección de lujo; esa quedó en La Habana encabezada por Andy Pereira, quien obtuvo bronce este año en una fase del circuito mundial juvenil.
Salta a la vista entonces que este deporte, muy practicado en el mundo, dentro y fuera del alto rendimiento, tiene un gran futuro en Cuba.
Como en casi todos los deportes, Venezuela debe ser aquí nuestro principal oponente. Los anfitriones tienen, entre otras figuras, a la experimentada Fabiola Ramos, segunda en el ranking latinoamericano.
Sin embargo, habrá que seguir a algunas individualidades de Chile, El Salvador y República Dominicana, país que últimamente depende de jugadores de origen asiático.
