Cinco años después de la separación de sus «papis», Laude podrá volver a convivir con ambos, pero a intervalos. Un juez otorgó la custodia compartida del perro a la ex pareja, que lo tendrá en períodos sucesivos de seis meses. Desde que el matrimonio decidió ponerle fin a la unión, Laude andaba en medio de las discusiones sobre con quién debía quedarse definitivamente, pero nunca se ponían de acuerdo. Hasta que «mamá» acudió a los tribunales, y estos decidieron que ambos podrían cuidarlo. La demandante se mostró feliz por la sentencia y Laude se libró, al fin, del tira y encoje de sus dueños.