La gatica Mini Mini SI le digo que después de presentar Fernanda y el extraño caso de las matas perdidas y Patricia y el golosito, los Estudios de Animación del ICAIC estrenarán próximamente El negrito cimarrón y los matungos y el primer capítulo de la serie Kukuy, el güije del charco azul: El almiquí valiente, mientras pone a punto Historias de las abejas: La miel, Quietud interrumpida y Fauna cubana, quizá usted me señale: «Bah, ¿y eso qué tiene de nuevo? Ya sabemos que ese es un colectivo incansable».
Y puede que para usted tampoco sea una noticia que le cuente que esa destacada institución acaba de alcanzar (por octavo año consecutivo) la distinción de Vanguardia Nacional, a la vez que continúa sumando premios internacionales. Sin embargo, apuesto a que lo sorprenderé al anunciarle que estos creadores se han empecinado en ponernos a cantar (sobre todo a los niños) con una nueva línea de producción: los videos clip animados.
Sí, si. Ya sé que los Lucas llevan la delantera y que no son pocos sus clips que se apoyan en la animación. Pero esta es una historia diferente. Todo comenzó casi por casualidad. El responsable, en buena medida, fue el realizador Juan Ruiz (La abeja que quería ser guerrera, Filminuto 61...), quien el pasado año participó en el Cinemazul. Y cosas de la vida, allá, en Las Tunas, le obsequiaron una canción: La tonada del gorrioncito, que como muchas otras del compositor Tony Miranda, había sido ganadora del festival Cantándole al sol. Solo le bastó escucharla para querer ponerse en contacto con el autor, quien le obsequió un fonograma con siete temas suyos.
Así que este licenciado en Historia del Arte llegó a La Habana con la idea de hacerle un clip a La tonada..., pero Mariposita y Cocuyo empezó a pujar. De hecho, terminó por vencer. Fue también Ruiz el encargado de traer de vuelta a un clásico como Barquito de papel. Pero esa es otra historia. Ahora conversemos con el padre del guión y/o la animación de obras como La Calabacita y Un día de paseo que tanto deleitaron a chicos y mayores por allá por las décadas del 70 y 80.
«Todo empezó en el ICRT, donde fui un pionero de este tipo de audiovisual. Entonces había un marcado interés por difundir la música infantil. De aquella época recuerdo mis trabajos con temas muy queridos de la chilena María Elena Walsh como La canción de la vacuna y El gato confite. Con el tiempo todo se fue apagando. Por eso estoy tan contento de que los Estudios hayan acogido este proyecto con tanto calor. Nuestros niños lo merecen».
LA LUZ Y EL BOOMNo fue necesario dar muchos argumentos a Armando Alba, subdirector de producción de los Estudios para que se hiciera la luz. También él extrañaba espacios como Tía Tata cuenta cuentos y Amigo y sus amiguitos, o Arcoiris Musical, donde la música infantil era la verdadera protagonista. «El propio Juventud Rebelde se hizo eco de la necesidad de recuperar el terreno perdido. Este es un problema que tiene más que ver con los medios que con la creación, porque ahí están aún Teresita Fernández, Kiki Corona, Liuba María Hevia, Rosa Campo...
«No es que nosotros estuviéramos ajenos a eso. Ya habíamos dado algunos pasos con Mariposita y Cocuyo y Barquito de papel, que surgió por un pedido de la hija de Enriqueta Almanza y de Ana Nora Calaza para un homenaje que se le rendiría a esa gran artista. Rui la Pestex, con letra, música y voz de Albertico Pujols, también nació cuando El Capitán Plin, de Jorge Oliver, cumplió un aniversario redondo. Así fue como rompimos el hielo».
Recuerda Armando que luego se digitalizaron canciones de las «viejas», como Marinero quiero ser, Lo feo, María Moñitos..., así como temas de Cantándole al sol y discos de Teresita Fernández. «Y lanzamos la convocatoria. A partir de ese momento no ha habido freno. Todos los días aparece sobre mi mesa un story board (guión dibujado) nuevo o alguien que busca una canción determinada para hacerle un video.
«Han sucedido cosas muy simpáticas. Por ejemplo, Lázaro Peñalver se apareció con que quería que le hallara aquel tema que decía: Dónde está la cutara, que dónde está... Y yo sin poder hacer nada. Sin embargo, le insistí: ¿Por qué no escuchas estas de Teresita? Y le puse Dame la mano. Cuando fui a proponerle otra me dijo: No hace falta, me quedo con esa. A los tres días me trajo el story board. Me dejó en una pieza».
Sin duda, la presencia de Ana Nora Calaza ha sido vital. Si bien ya había mantenido contacto con los Estudios —hizo voces en Kukuy...—, su ayuda es inestimable. «Ella ha hurgado en los archivos del ICRT, ha buscado las matrices musicales. Por su empeño pudimos dar con Un día de paseo interpretado por Rosita Fornés; con Barquito de papel en la voz de Consuelito Vidal; Juan me tiene sin cuidado, en la de Aurorita Basnuevo; o La pavita pechugona, en la de Marianita Morejón. Al mismo tiempo constantemente nos trae temas que fueron hitos en determinadas épocas y han quedado en el olvido. Ahora viene la fase de enamorar a los muchachos con esas nuevas propuestas», explica Armando.
«Evidentemente estamos muy en sintonía, tenemos sueños comunes, como rescatar ese abundante patrimonio musical de valor inestimable. Le propusimos hacer un video con Los Yoyos, esas marionetas que aún existen y nos hicieron tan felices. Así que nuevamente les daremos vida y adquirirán los aires de estos tiempos», agrega Esther Hirzel Galarza, directora de los Estudios.
LA PROPUESTARui la Pestex Lo más llamativo es la variedad de diseños. Y es que cada creador aporta su estilo. Luis Ernesto González de 34 años, por ejemplo, no solo ha realizado los de La gatica..., cuyo director es Antonio Nodarse, sino que ha sido animador de videos o películas como Rui la Pestex, Fernanda..., Nené traviesa, Más vampiros en La Habana. Y esto lo tiene más que entusiasmado. «La gatica... es como un gran musical al estilo de los años 70. Nodarse me pidió una gata humanizada y creo que lo he logrado. Y lo más importante, ojalá les guste a los niños. Estoy muy motivado, ya empecé a trabajar con El soldadito de plomo y La pavita pechugona. Y es que yo crecí con esas canciones, que no pierden la frescura ni su poder de comunicación».
Por su parte, Nelson Serrano Rubio, de 33, admite que le encanta «esa onda del video clip», y como si no fuera suficiente es padre de tres pequeños. «Desde que Armando llegó con este proyecto le pedí hacer El espantapájaros que interpretaba Kike Díaz, porque con ella dormía todas las noches a mis hijos», apunta el responsable de los diseños y de la dirección de animación de Mariposita y Cocuyo, quien espera materializar su versión de Juan me tiene sin cuidado. «Es nuestro homenaje a aquel realizado en stop motion (marionetas). Utilizaré la idea base de la historia anterior, pero lo haré en animación convencional».
Según Armando ese no será el único tributo: Mi gatico Vinagrito conservará el diseño de aquel famoso clip de Juan Alea, «porque hay materiales que difícilmente puedan ser superados».
La abeja y la flor Ahora a Mariposita y Cocuyo, Barquito de papel y Rui la Pestex, se suman La gatica Mini Mini y Balada de Elpidio Valdés, mientras están en preparación (y muy adelantados) El espantapájaros, Un día de paseo, La abeja y la flor, Voy a dar la vuelta al mundo, Tintín, la lluvia, Arroz con leche, Vamos todos a cantar, Ratoncín y Doña Rata, El ratoncito del farol, Marinero quiero ser, Dame la mano, Cae una gotica de agua, Mi caballero (tomado de Ismaelillo, de José Martí), Amanecer feliz, Solo la verdad, La marcha de las letras, La canción de la vacuna...
—Esther, ¿y dónde podrán ser vistos estos videos?
—Afortunadamente en los últimos tiempos hemos abierto más nuestro diapasón. Es decir, que no estamos pensando solamente en el espacio que tenemos con los estrenos del ICAIC en las salas video y cine del país, ni únicamente en la difusión que pueda darle la televisión. Recientemente les entregamos a los Joven Club de Computación y Electrónica casi toda nuestra producción en formato digital. Asimismo pusimos a disposición de la Organización de Pioneros José Martí (OPJM) discos con 18 de los 25 cortos de Elpidio Valdés
—logramos recuperar buena parte de la obra de Juan Padrón en formato de cine—, además de los materiales que nos llegaron del Festival Internacional del Audiovisual para la Niñez y la Adolescencia.
«Partimos de la tesis de que si cada escuela tiene un televisor, un video, una computadora, entonces allí pueden estar nuestros materiales. Para eso contamos con el apoyo de la OPJM, de la UJC y del ICAIC. Se suma a este esfuerzo la Casa Editora Abril, que tiene planes de publicar en la venidera Feria Internacional del Libro un volumen para colorear —seguramente se convertirá en una serie—, el cual contendrá los diseños de los animados que aparecen en estos videos, así como las letras. No se trata de hacer 15 videos para una fecha señalada y se acabó, sino de consolidar esta nueva línea. Nos quedan por delante unos cuantos años para agotar estas canciones escritas y las que vendrán. Y estoy convencida de que con estos audiovisuales vamos todos a cantar».
Los presentadores de Sopa de palabras y Alánimo conducen el colorido espéctaculo. Foto: Franklin ReyesComo el deseo de rescatar estas canciones infantiles de ayer, hoy y siempre, es una sana obsesión de muchos, esta tarde, a las 5:00 p.m., volverá a tener lugar, como este sábado, una gala de interpretación en la sala Avellaneda del Teatro Nacional.
Preparada por la Organización de Pioneros José Martí (OPJM), el Ministerio de Cultura y el Instituto Cubano de la Música, en este colorido espectáculo participan probados intérpretes infantiles de toda la Isla (excepto Sancti Spíritus y Cienfuegos), quienes son acompañados por la Orquesta Sinfónica Juvenil y el Coro Diminuto de los Conservatorios de Música Guillermo Tomás y Alejandro García Caturla, respectivamente.
En el gran concierto de esta tarde, dedicado al Día de los Niños y al IV Congreso de la OPJM, donde estarán como invitados Rita del Prado, el dúo Karma, BB Compañía y actores de los espacios televisivos Sopa de palabras y Alánimo, se interpretarán temas de compositores muy conocidos, además de otros que han triunfado en las diferentes ediciones de Cantándole al sol.