Cuba recibe al Presidente vietnamita con la calidez de un amigo

«Aquí lo estamos recibiendo los viejos y los nuevos amigos que tiene en Cuba», aseguró el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, tras el cálido abrazo con que temprano en la mañana de este jueves dio la bienvenida a Cuba a To Lam, secretario general del Partido Comunista y presidente de la República Socialista de Vietnam.

Ese encuentro, que tuvo lugar en uno de los salones protocolares del Hotel Nacional, fue la antesala de una intensa agenda de trabajo que incluyó la visita de ambos mandatarios a la Zona Especial de Desarrollo Mariel.

Estamos convencidos, aseguró el Jefe de Estado cubano, de que su visita «va a marcar un hito importante en el fortalecimiento de nuestras relaciones», las cuales tienen lazos históricos y profundos.

Al «amigo y hermano» agradeció Díaz-Canel por «el gesto de que una de sus primeras visitas internacionales haya sido precisamente Cuba», y también por «las contundentes palabras de apoyo incondicional» que ha manifestado respecto a nuestra lucha contra el injusto bloqueo económico, comercial y financiero que nos ha impuesto el Gobierno de Estados Unidos, así como a la exclusión de la Mayor de las Antillas de la lista de naciones que supuestamente patrocinan el terrorismo.

Tras reiterar las condolencias de nuestro país por las pérdidas de vidas humanas y los daños materiales ocasionados en Vietnam por el reciente paso del tifón Yagi, el dignatario cubano ratificó la disposición de Cuba de ayudar con una brigada médica a esa hermana nación si así lo necesitaran.

Muchos de los actuales dirigentes en Cuba, explicó Díaz-Canel, somos de una generación que nació durante los primeros años de la Revolución y creció escuchando hablar de Vietnam y admirando el heroísmo de su pueblo.

«Ustedes son para nosotros un importante referente», aseveró el mandatario, quien destacó la «laboriosidad, bondad y patriotismo que distingue a los vietnamitas» y corroboró a su homólogo la seguridad de que «los sentimientos de Cuba hacia Vietnam son invariables».

El mundo ha tenido muchos cambios, comentó por su parte el presidente To Lam, pero «la amistad y la solidaridad de Vietnam y Cuba nunca va a cambiar».

En momentos buenos y en momentos difíciles Cuba ha estado a nuestro lado, recordó, y por eso «no olvidaremos el heroico apoyo en nuestras luchas pasadas y también en la actualidad, aunque estamos en dos extremos del planeta».

Tras aseverar que Cuba «siempre ha estado en primer plano en las relaciones exteriores de Vietnam», el mandatario amigo reiteró que «la posición de nosotros siempre será la de apoyar a Cuba».

Agradeció, además, los mensajes de condolencias y el apoyo manifestado luego del paso reciente del tifón Yagi por su país. «No solo compartimos las dificultades del bloqueo, también las que traen consigo los desastres naturales», subrayó.

Esta visita, significó To Lam, no solo nos permitirá desarrollar nuestras relaciones de forma más eficiente y práctica en beneficio de nuestros países, sino también en beneficio de los movimientos de izquierda, socialistas y comunistas en el mundo.

De ahí la relevancia que concedió en sus palabras a «consolidar la solidaridad y el apoyo mutuos».

El empresariado vietnamita apuesta por Cuba

Hasta la Zona Especial de Desarrollo Mariel llegaron juntos esta mañana de jueves Díaz-Canel y To Lam para llevar a cabo una visita en la cual se repasaron los importantes vínculos de negocios que existen entre ambas naciones y las potencialidades para continuar desarrollándolos.

Ana Teresa Igarza Martínez, directora general de la Zona Especial de Desarrollo Mariel, actualizó a los presentes sobre la historia, potencialidades y oportunidades de este importante enclave, donde se encuentran cinco negocios vietnamitas en operaciones, a los cuales se sumaron otros dos en esta jornada.

De acuerdo con la explicación ofrecida por Igarza Martínez, Vietnam es el principal inversionista en Cuba de los países asiáticos y los negocios que aquí se han establecidos se desarrollan fundamentalmente en los ámbitos de la industria ligera y la producción de alimentos.

En diálogo con los empresarios vietnamitas presentes en el encuentro, los dos presidentes conocieron acerca de sus criterios y experiencias en lo concerniente al trabajo que realizan en Cuba, al cual concedieron un elevado valor por las oportunidades que se han ido fortaleciendo.

Al dirigirse a ellos, el Presidente Díaz-Canel reiteró a su homólogo vietnamita la importancia de su visita a la isla caribeña, al tiempo que agradeció la presencia del empresariado de su país en la Zona Especial de Desarrollo Mariel, lo cual patentiza las históricas relaciones que unen a ambas naciones y abre nuevas perspectivas para la cooperación.

Igualmente, destacó la alta preparación que los distingue y la sensibilidad que han manifestado por los problemas de Cuba.

Lo que hacemos en estos momentos demuestra, valoró, que las relaciones entre países, sobre la base de la solidaridad, son las que deben perdurar en el mundo, sobre todo en medio del actual contexto que vive la humanidad.

De la misma forma que ustedes han apoyado a Cuba, subrayó, Vietnam siempre podrá contar con el apoyo de Cuba.

Por su parte, el mandatario To Lam refirió que su país valora altamente la confianza que tiene Cuba en el empresariado vietnamita y ratificó la disposición de Vietnam para apoyar a la Mayor de las Antillas a superar dificultades.

Estoy muy emocionado de estar aquí, aseveró, y poder apreciar personalmente el desarrollo que hemos alcanzado de conjunto, así como la «alta confianza que tiene Cuba en el empresariado de mi país».

Nos satisface, subrayó, «apoyar a Cuba para superar dificultades, y estos primeros inversionistas abren caminos para continuar desarrollando los negocios».

Finalmente, los mandatarios visitaron áreas de la empresa Suchel TBV S.A, dedicada a la producción de detergentes para uso doméstico e industrial, y dialogaron con trabajadores de ViMariel S.A, el primer concesionario de la Zona Especial de Desarrollo Mariel.

Cuba y Vietnam, cuyas relaciones diplomáticas datan del 2 de diciembre de 1960, están unidas por históricos lazos de hermandad, solidaridad y cooperación, forjados por el presidente Ho Chi Minh y el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

A ellos y su legado imperecedero para el fomento de esos vínculos se recordó también de manera especial en diferentes momentos de la primera jornada de trabajo del mandatario To Lam en esta, su primera visita oficial a la Mayor de las Antillas.

Amplia agenda de intercambios

Durante la extensa jornada de trabajo, el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Esteban Lazo Hernández, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado, también dio la bienvenida este jueves al Secretario General del Partido Comunista y presidente de la República Socialista de Vietnam, compañero To Lam.

Lazo Hernández resaltó en la sede institucional de la Asamblea Nacional del Poder Popular los históricos y especiales lazos de hermandad que unen a Cuba y Vietnam, vínculos inquebrantables forjados por Fidel Castro y Ho Chi Minh. «Nuestros pueblos y principales dirigentes han construido una relación ejemplar, símbolo de nuestra época, de profunda solidaridad y unidad», significó.

Más tarde, de igual modo, el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, recibió al distinguido visitante. El Jefe de Gobierno cubano le expresó al presidente vietnamita, To Lam, la importancia de las relaciones de cooperación y amistad entre ambos países, establecidas desde 1960.

Le reiteramos que pueden contar con la solidaridad y el apoyo permanente de Cuba en estos difíciles momentos y estaremos listos para responder de manera inmediata a cualquier solicitud de apoyo del hermano pueblo de Vietnam, apuntó Marrero Cruz.

Por su parte, To Lam destacó la intención de fortalecer la cooperación económica y los vínculos políticos entre ambos países, mientras la relación bilateral se prepara para celebrar su aniversario 65 el próximo año.

Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana