NUEVA GERONA, Isla de la Juventud.— Para buscar soluciones a los problemas en la producción de alimentos se inició en este Municipio Especial la preparación de un experimento que incluye políticas que estimulan la eficiencia y perfeccionamiento de las bases productivas.
El miembro del Buró Político del Partido Marino Murillo Jorge, jefe de la Comisión Permanente para la Implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, informó que la experiencia consiste en la venta liberada de insumos, equipamiento y servicios para las labores agrícolas, que contribuyan a elevar la productividad y la economía familiar y local.
Explicó que se estudiará la manera de igualar las capacidades financieras de todas las formas de producción, a fin de que cada una tenga acceso a la nueva manera de gestión: «El problema principal que limita la producción de alimentos en Cuba es la falta de insumos y la manera en que se distribuyen, y eso es lo que el proyecto pretende transformar», dijo.
Recordó que las políticas para la comercialización de piensos y subproductos industriales para alimento animal fueron aprobadas el 30 de mayo en el Consejo de Ministros.
Gustavo Rodríguez Rollero, ministro de la Agricultura, precisó que la Isla de la Juventud se seleccionó por su condición de isla, que ayuda a la actividad de control, y porque cuenta además con un Plan de Desarrollo Integral (2012-2020), al que se suma el experimento.
Durante la primera reunión preparatoria se conoció que en este proyecto se involucra a las empresas y unidades productoras del sistema de la Agricultura, Comercio Interior, Industria Alimentaria, el Banco Nacional de Cuba, agentes jurídicos y el Seguro Estatal.
Según un informe presentado, entre las limitaciones más importantes para avanzar con celeridad y calidad en este municipio figuran problemas en la transportación marítima de carga, capacidad de almacenaje y calidad en la impermeabilización de los frigoríficos, entre otras.
Murillo Jorge informó que la intención es iniciar la aplicación del proyecto a partir del mes de enero de 2014, al tiempo que llamó a la responsabilidad de todos los implicados en el experimento, en aras de lograr transformar con calidad la realidad productiva del país.
Recalcó que en Cuba todavía existen tierras ociosas y otras deficientemente explotadas, mientras se gastan millones de pesos anualmente en la importación de alimentos que se pueden producir en el territorio nacional.