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El presidente de Ecuador, Rafael Correa Delgado, intervino en el acto de recordación del aniversario 50 de la entrada de la Caravana de la Libertad liderada por Fidel a la antigua fortaleza militar de Columbia, hoy Ciudad Escolar Libertad
«Una Revolución se construye desde cada amanecer (...) Expresamos nuestra más profunda solidaridad con el proceso revolucionario cubano (...) La revolución jamás será triste, siempre será una fiesta».
Fueron estas algunas de las impactantes y poéticas reflexiones hechas por el presidente de Ecuador, Rafael Correa Delgado, al hablar en el acto de recordación del aniversario 50 de la entrada a La Habana de la Caravana de la Libertad liderada por Fidel, el 8 de enero de 1959, efectuado en la tarde de este jueves en el antiguo cuartel de Columbia, con la presencia del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, General de Ejército Raúl Castro Ruz.
«Hoy, cincuenta años después, ese lejano 1 de enero de 1959, o aquel 8 de enero de hace medio siglo, ya son fechas gloriosas para todos los movimientos revolucionarios del mundo»..., sentenció Correa, y agregó que en homenaje a la Revolución «demandamos y exigimos... el fin del criminal bloqueo, etnocidio premeditado por los poderes de siempre».
En el acto, al que asistieron más de 2 000 capitalinos, en representación de toda Cuba y en el que estuvieron presentes además miembros del Buró Político, del Secretariado del Comité Central del Partido, familiares de Camilo Cienfuegos, de los Cinco Héroes y expedicionarios del Moncada y del Granma, habló también Pedro Sáez Montejo, primer secretario del Partido en Ciudad de La Habana e integrante del Buró Político.
«Raúl nos ha llamado a no olvidar nunca que esta Revolución se hizo por los humildes, con los humildes y para los humildes», recalcó Sáez Montejo.
Dijo que cada uno de los cubanos tiene una historia que contar luego de medio siglo de lucha y de resistencia y que Fidel, revolucionario de dos siglos, continúa encabezando nuestra marcha en la historia.
«Cuba se ha levantado con la gallardía de un pueblo y el liderazgo de sus dirigentes históricos, y es el anhelo de millones de hombres y mujeres en el mundo», apuntó.
Expuso con énfasis que a este polígono, escoltado por un mar de pueblo, entró la Caravana de la Libertad del Ejército Rebelde (...) y al frente de ella, como siempre, nuestro invicto Comandante en Jefe...
«Como lo advirtió Fidel aquel 8 de enero de 1959, nada ha sido fácil en estas cinco décadas, pero en esta oportunidad se materializaron los sueños de libertad de muchas generaciones», manifestó.
