ROMA, junio 2.— Los discursos del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon; el director de la FAO, Jacques Diouf, y un mensaje del Papa Benedicto XVI marcarán la apertura, hoy, de la Cumbre sobre Seguridad Alimentaria en esta capital.
Aunque países en vías de desarrollo miran con escepticismo la realización del evento de tres días, aceptan que se trata de un buen espacio para debates y acciones futuras para resolver problemas de ese tipo, comentó PL.
Diouf reiteró que la reunión debiera convertirse en la oportunidad histórica de hacer de la lucha contra el hambre y la pobreza en el mundo una práctica cotidiana.
Entre los asistentes se encuentran los presidentes de Argentina, Cristina Fernández; Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y República Dominicana, Leonel Fernández. También se anuncia la llegada de los gobernantes de Bolivia, Evo Morales, y de Nicaragua, Daniel Ortega.
Por Cuba participa una delegación encabezada por el primer vicepresidente, José Ramón Machado Ventura, quien llegó la víspera aquí, acompañado por el también vicepresidente Esteban Lazo; el miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista y jefe de su Departamento de Relaciones Internacionales, Fernando Remírez de Estenoz, y el canciller Felipe Pérez Roque. Además, representan a Cuba el viceministro para la Inversión Extranjera y la Colaboración Económica, Orlando Requeijo, y el embajador de Cuba ante la FAO, Enrique Moret.
Cuba espera que la comunidad internacional asuma un compromiso real para afrontar la amenaza latente de una escalada de hambruna mundial, cuyos primeros signos se hicieron tangibles en los últimos meses.
Según la FAO, 862 millones de personas padecen hambre en el mundo, de las cuales 830 millones están en las naciones en vía de desarrollo.