Para la Revolución sigue siendo prioridad la atención integral de sus niños. Foto: Roberto Suárez «Me siento contenta pues tengo un espacio»; «Gracias por dejarme aprender, privilegio que puedo tener»..., estos y otros más fueron los estribillos de las canciones que, en la mañana de este martes, los pequeñines del Círculo Infantil Los bomberitos, del municipio de 10 de Octubre, en Ciudad de La Habana, regalaron a sus compañeritos, educadoras, auxiliares pedagógicas, directivos, padres y vecinos de la comunidad y, en especial, a Fidel, ese hombre grande que no ha dejado de ser niño.
Y la ocasión no podía ser mejor porque precisamente este martes 10 de abril toda Cuba celebró el Aniversario 46 de la creación de los Círculos Infantiles.
¿Regalos? Muchos. Incontables. Permeados todos de esa maravilla que son los niños, por su gracia en el decir y en el andar.
De tal suerte, la Organización de Pioneros José Martí los convocó para, en nombre de todos, hacerle un merecido homenaje a los que han dedicado buena parte de sus vidas al arte de enseñar a crecer a los pequeños, pero también para estimular a los nuevos que se suman a la noble tarea de moldear el carácter.
Canciones. Ramos de flores. Diplomas de reconocimiento. Mensajes en nombre de las 46 educadoras más destacadas del país y del padre agradecido.
Momento especialísimo fue cuando los niños de Los bomberitos le enviaron a Fidel su mensaje de felicitación. En un cuadro entregado a Tomasa Romero Espinosa, vicetitular del Ministerio de Educación (MINED), para que se lo hiciera llegar al Comandante en Jefe, encontraron espacio frases como estas: «Gracias mil por defender lo que hoy tenemos, por permitirnos ver el cielo en las mañanas... Por ser guía en el camino en el que andamos, y por darnos mil motivos de sonrisas...»
Y ese agradecimiento llegó también en la voz de los adultos. Lo dijo la Viceministra cuando en el resumen del homenaje afirmó que «este Aniversario 46 es la ratificación del compromiso de seguir llevando la noble tarea de la formación de nuestros niños más pequeños a nuevos niveles de desarrollo; sea, también, el compromiso de formar desde este imprescindible y preciado primer escalón, nuevas generaciones de cubanos más cultos, más sensibles, más humanos».
Hoy, el trabajo por elevar la calidad en la atención educativa en estas instituciones continúa siendo una prioridad. Ejemplo de ello son, entre otros, la universalización de la licenciatura en educación preescolar; la creación del centro de referencia latinoamericano para la educación preescolar; la incorporación de docentes a la maestría en ciencias de la educación y la incorporación de 3 856 docentes al aprendizaje de la guitarra.
Este martes diecisiete de las 46 educadoras de círculos infantiles más destacadas del país recibieron el diploma que acredita su ejemplar desempeño en la atención integral a nuestros niños en la más temprana edad.
Según representantes de la OPJM, reconocimientos similares al realizado en el Círculo Infantil Los bomberitos, se organizaron, de manera simultánea, en todas las provincias del país.