La tecla del duende
Un lector de nuestra columna, Yohan Erisdel Pérez Garcés, ha convocado en Facebook a repasar sitios donde estuvimos algunos tecleros antes de la COVID-19. En su recuento y el de un numeroso grupo aparecen Baracoa, Santiago de Cuba, Las Tunas, Jobabo, Granma, Camagüey, Ciego de Ávila, Morón, Guaracabulla… y quién sabe cuántos lugares más.
Iniciativa similar pueden emprender los ocurrentes holguineros, en sus homenajes a Vilma Espín en Segundo Frente; a Céspedes, Mariana, Martí y Fidel en Santa Ifigenia; sus excursiones al centro y occidente de Cuba, las labores de trabajo comunitario.
Y este redactor piensa en los que ha visitado, pero sobre todo en los que visitará. Walkiria Cao Fonticoba, la superabuela de los tecleros por siempre, realizó hace 15 años ese ejercicio de futuro. Esta vez viene de la mano de Pepe Galarraga, pensando en 2022:
Enero me sorprendería en la alborada martiana, homenajeando a Julio García Luis y a Augusto César Sandino, en el municipio que lleva por nombre el apellido de este último. Para febrero visitaría el Lawton natal de Camilo en sus 90; también el Tarará de los mártires y de la resistencia de Rolando Pérez Quintosa. El tercer mes del año me llevaría al Museo de la Revolución y Radio Reloj; el cuarto sería una lluvia de iniciativas por los pioneros y la Juventud.
Mayo de los trabajadores me llevaría al junio de Juan Bruno Zayas y los mambises. Reservo para julio el tránsito por Guaracabulla y la evocación a Guillermo Cabrera Álvarez; la visita a Cárdenas, con sus tres museos cercanos y la casa natal de José Antonio Echeverría, entre ellos. De ahí a Santiago, al Moncada y al municipio Frank País, donde se perpetúa la ejecutoria del indómito David. A Birán en agosto, luego a San Juan y Martínez y, desde ahí, a la Radio Cubana en su centenario.
Septiembre me sorprendería en Cienfuegos, en torno al día 5. En octubre, entonaría la Canción del Elegido en Encrucijada y emprendería una ruta desde Santa Clara hasta el municipio Bolivia, en homenaje a la guerrilla guevariana. Noviembre: festejaría los aniversarios de las universidades de Camagüey y Las Villas. Para diciembre, por el centenario de la FEU, visitaría el municipio de Mella, homenaje político-administrativo al eterno fundador.
Como dijera el poeta, al final de este viaje en la vida quedará nuestro rastro invitando a vivir.
Si no sabes a dónde vas, regresa para saber de dónde vienes. Proverbio.