Acuse de recibo
El 21 de julio de 2021, y desde El Cobre, Santiago de Cuba, Yohandris Paz Hidalgo contó aquí que llevaba más de dos años tratando de legalizar infructuosamente un auto Ford de 1953, chapa P051428, para el cual adquirió legalmente en la agencia SASA de esa ciudad un motor de uso con el número 3337704.
Al intentar legalizar los cambios en el Registro de Vehículos, le informaron que ese motor estaba instalado en el vehículo con chapa B022221, de cadenas de Tiendas Caribe en La Habana. Y como Yoandris es también trabajador de esa cadena en Santiago, con la ayuda del técnico de transporte contactó con el técnico Alberto Arias en la empresa, quien buscó en los registros: Y el vehículo con chapa B022221 tenía su motor con la numeración 3397704, en la provincia de Mayabeque.
Con esa evidencia, Yoandris fue a la empresa Desembarco del Granma, entidad que recupera los motores de vehículos y se los suministra a SASA. «El motor que adquirí legalmente y con mucho sacrificio, decía, fue entregado por TRD Camagüey. A través del técnico
de transporte contacté con Camagüey, que me envió el anexo 1, documento que entrega la Desembarco del Granma cuando recibe los motores, certificando que lo recibió.
«Con todas estas pruebas, vuelvo nuevamente al Registro de Vehículos, que testifica a mi favor, pero me dice que no puede hacer nada. Tras mucha insistencia me atendió la jefa del Registro de Vehículos Santiago, teniente coronel Ivet Fornaris, quien después de escucharme y realizar varias llamadas, contactó con el jefe de Trámites de Mayabeque para que citaran el vehículo y hacer un levantamiento, pues en los registros allí, ese vehículo en su documentación tiene una nota que dice: número no legible o de difícil acceso.
«Después de aportar tanta información al Registro de Vehículos, donde se demuestran los errores que les compete a ellos subsanar, ¿qué debo hacer, para poder legalizar lo que me costó tanto esfuerzo adquirir? No sé qué camino tomar…», concluía.
Ahora vuelve a escribir Yoandris, quien esta vez aclara que el Ford 52 chapa P051428 es propiedad de su padre,
Luis Ángel Paz Hidalgo. Y cuenta que tras publicarse su queja, a los tres días lo citaron de Atención a la Ciudadanía del Minint en Santiago. Allí, un Mayor le planteó que fue al Registro de Vehículos y le informaron que ellos no tenían que ver con eso. Que cuando introducían el número del motor aparecía que estaba puesto en dicho vehículo.
Yoandris le explicó que en la carta no decía que era culpa de ellos, pero entendía que el Registro de Vehículos era uno solo en el país. Que el vehículo no era de la Habana, sino de Mayabeque, y era de la cadena de Tiendas Caribe.
Al habla con los de Tiendas Caribe en Mayabeque, Yoandris les explicó que la única solución era que ellos fueran al Registro de Vehículos de esa provincia y sacaran un turno para que le hicieran el levantamiento al número del motor del vehículo de marras allá.
El trámite no fue fácil, dice, hasta que al fin en diciembre de 2021 fueron los inspectores del Registro de Vehículos e hicieron el levantamiento. Al fin descubrieron que el número del motor no coincide con el que está en la circulación.
Y le explicaron a los de Transporte de Tiendas Caribe Mayabeque que ahora ellos tenían que hacer un expediente para arreglar el error.
Yoandris dejó que pasaran unos meses, y en marzo de 2022 llamó a Tiendas Caribe Mayabeque. Le informó el de Transporte allí que aún no tenía respuesta, y seguía llamando en varias ocasiones. Esa era siempre la respuesta. Yoandris le dijo que ellos tenían el mismo problema, pues su carro estaba igualmente «ilegal», para ver si de allí hacían una reclamación al Registro de Vehículos.
«Yo seguía esperando y nada, afirma. Y para mi sorpresa hablo con mi compañero en Mayabeque y él me dice que fue al Registro de Vehículo y que nadie sabe del expediente. Ya han pasado bastantes meses desde que hicieron el levantamiento… Nadie me da una respuesta clara de la situación. ¿Hasta cuándo la falta de respeto? ¿Alguien sería capaz de decirme que el expediente se perdió por culpa del bloqueo? Ya llevo desde que fui a inspeccionar el carro hasta la fecha más de dos años y medio, y no me dan respuesta».