Acuse de recibo
Los amantes de la buena música extrañan hace tres años las tradicionales retretas que ofrecía la Banda de Conciertos de Holguín, en el céntrico parque Calixto García. Desde calle 164, entre 19 y 25, reparto Piedra Blanca de esa ciudad, Carlos Hernández lamenta esa ya casi perdida costumbre, en una urbe distinguida por su apego a elevadas manifestaciones de la cultura.
Entre las razones aducidas, cuenta, están las dificultades para trasladar los instrumentos de la Banda y para costear la iluminación. También menciona la interferencia de «irrespetuosos audios» alrededor, que impiden disfrutar los conciertos de la prestigiosa Banda, próxima a cumplir 90 años.
Carlos reconoce las dificultades económicas, pero argumenta que el local donde se guardan los instrumentos de la Banda dista apenas 200 metros del parque Calixto García, por lo cual el gasto de combustible es ínfimo. «Vale la pena analizar —apunta— si es real esta justificación, ante el gasto de combustible que tiene el Centro Provincial de la Música (CPM) para otros menesteres». Es inexplicable, dice, que no pueda pagar las luces de la Retreta, evento subvencionado por su peso cultural, cuando esa misma entidad sufraga bailables y otros espectáculos.
Este colectivo de músicos —añade— sobresale por su desempeño artístico, mantenido más allá de diversos contratiempos, entre ellos el de no contar con local de ensayos, pues el suyo fue derribado por el huracán Ike. Esa excelencia es reconocida por la UNEAC, que los apoya debidamente.
Agrega que ese colectivo tiene dificultades con el vestuario, los instrumentos y el mobiliario con muchos años de uso; además de la escasa divulgación.
«Noventa años al servicio de la mejor música en Holguín, no pueden admitir tanta desidia y abandono», concluye el lector.
El próximo 16 de abril se cumplirán 86 años de la muerte del versátil y cubanísimo Arquímedes Pous, figura emblemática del teatro vernáculo que dio carne al popular personaje del Negrito. A propósito, escribe con una vindicación el ilustre colega de Prensa Latina, Manuel Guerrero, cienfueguero nato como el venerable actor y teatrista.
Guerrero, decano de la prensa cienfueguera, desde sus pininos en La Correspondencia, piensa que sería un acto de justicia restituir a su sitio original, en el bello parque Martí de la elegante ciudad, el busto erigido allí a Pous en 1950 por suscripción popular.
En 1977, «por una decisión absurda», que se esfuma con la pátina del tiempo, el busto fue bajado de su pedestal, «por disposición de un funcionario, con el argumento de que desentonaba con el entorno anterior», según Guerrero. Y allí está en el patio del teatro Tomás Terry, donde espera por un acto de justicia.
Como buen periodista, Guerrero hace honor a su apellido, cuando señala en su carta: «Si prevaleciera el criterio de quien o quienes cambiaron de lugar la obra que enaltece al notable artista, peligraría la estatua en bronce de Benny Moré, situada años más tarde en el céntrico Paseo del Prado de la Perla del Sur, porque no figuraba en el diseño original.
«Igual destino tendrían las figuras del mítico músico británico John Lennon, el singular Quijote y el afamado Caballero de París, situadas en céntricos parques de La Habana, además de otras representaciones en varios sitios del país. Entre esas esculturas está también la del Bárbaro del Ritmo, situada junto al mar en la ciudad de Manzanillo, a la que cantó en una hermosa guajira».
Añade Guerrero que durante el último congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba y en otras reuniones, el Historiador de La Habana, Eusebio Leal, defendió la idea de rescatar los viejos valores y desterrar para siempre la tendencia a borrar el pasado, desechar monumentos y estatuas.
«El nuevo aniversario de la muerte de Pous sería ideal para que la UNEAC en Cienfuegos trate de que se repare esa absurda decisión. Para vindicar al genial artista», termina.