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La posta cubana logró un excelente desempeño, tras incluirse en la final. Autor: World Athletics Publicado: 05/08/2021 | 10:11 pm
TOKIO.― Con la misma naturalidad de las zancadas con que lograron un tiempo de ensueño para clasificar por derecho propio a la final del 4x400, lo contaron después ante la prensa. «Wow, increíble, todavía no lo creemos», dijeron las cuatro muchachas encargadas de recordar que la posta cubana es la vigente campeona mundial.
Salieron de la pista eufóricas, levitando. Acababan de estampar 3:24.04 minutos, lo mejor para ellas en la temporada y el séptimo registro en el ranking universal del año.
Parecía que no iban a poder, pues no se corría sobre la pista. Se volaba. Y las nuestras detrás, hasta que en los últimos metros Lisneidy Veitía, que lo tenía todo calculado, milimétricamente pensado, puso el cambio de velocidad y terminó enseñándo la espalda a seis rivales.
«Estamos sorprendidas con el tiempo, pero sabíamos que podíamos mejorar el del campeonato mundial de Polonia, pues individualmente hemos superado nuestros resultados y estamos bien preparadas. Somos cuatro con el mismo sentir, enfocadas en un mismo propósito», comentó Zurian, la encargada de empezar.
«Yo salí a hacer mi carrera, porque el que se desespera pierde», dijo Lisneidy, la muchacha del cierre espectacular.
Las cuatro confían en que puedan recortar más segundos el sábado en la
final. Con Roxana Gómez, quien no compitió reservándose para la final de los 400 metros, el podio se pone unos metros más cerca. Y ellas lo saben.
Después de correr en tantas pistas del mundo, fueron categóricas al referirse a la de Tokio: «como esta, ninguna. Uno siente que va volando».
Se augura una final olímpicamente endemoniada. De los diez mejores cronos de 2021, nueve se hicieron este jueves en la mágica noche de semifinales.
Las chicas cubanas están planeando un asalto olímpico con el batón por pistola y unas piernas que danzan sobre la pista, y ojo, que hasta el récord nacional de 3:23.21 minutos puede pasar un susto.
Ninguna cuarteta de 4x400 femenina ha subido a un podio en citas bajo los cinco aros y solo dos cortas de ese sexo, en los lejanos 1968 y 1972, llegaron a preseas, plata y bronce, respectivamente. El sábado puede haber de todo…
Lejos del podio
Del resto de la jornada, la pertiguista Yarisley Silva, plata en Londres 2012, no pasó de 4,50 metros en sus cuartos Juegos Olímpicos y quedó en octavo lugar; mientras Cristian Nápoles, con 16,63 metros, fue décimo en el triple salto, prueba ganada por Pedro Pablo Pichardo. El representante de Portugal, que antes había competido por Cuba, fijó el récord nacional del país europeo en 17,98 metros.
