El tiro deportivo es una de las disciplinas más afectadas por la política de asedio que hace décadas castiga injustamente a Cuba. Autor: Roberto Morejón Rodríguez Publicado: 17/02/2021 | 11:50 pm
El Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (Icap), mediante un encuentro online efectuado este miércoles, se unió a la condena de los efectos provocados al deporte por el bloqueo económico, comercial y financiero del Gobierno de Estados Unidos durante casi seis décadas.
Directivos, atletas en activo, glorias deportivas ya retiradas, profesores de Educación Física, entre otros, alzaron sus voces contra el cruel cerco de esa nación norteamericana, durante el evento que se pudo seguir por la plataforma digital @SiempreconCuba en Facebook, Twitter y YouTube, y que contó con la presencia en la sala virtual de Fernando González, presidente del Icap.
Uno de los mejores exponentes del tiro deportivo antillano en la actualidad, el pistolero capitalino Jorge Félix Álvarez, declaró que su disciplina está entre las más perjudicadas, pues ante las suspensiones de certámenes y bases de entrenamiento en el exterior debido a la COVID-19, la preparación en territorio nacional ha seguido sintiendo la falta de implementos necesarios para garantizar un adiestramiento de calidad.
Mientras Yadira González, directora general de la empresa Cubadeportes, expresó que el bloqueo dificulta el cobro de los servicios que nuestro país presta en diferentes naciones del orbe, lo que se refleja en saldos elevados de cuentas por recaudar. Agregó que las empresas contratadas no encuentran una vía bancaria segura para realizar los pagos, teniendo consigo un costo alto para el movimiento deportivo antillano.
El director del Laboratorio Antidoping de La Habana, Rodney Montes de Oca, explicó que es una exigencia trabajar con estándares de calidad
elevados y esto «constituye un reto adicional teniendo en cuenta el impacto del bloqueo de Estados Unidos, especialmente en el área del control antidopaje. En estos laboratorios se labora con tecnología de punta y muchos de los equipamientos son de procedencia norteamericana, por lo que resulta muy complejo adquirirlos y luego mantenerlos».
«Pese a los serios inconvenientes seguimos adelante, hemos contado con la solidaridad de grupos de amigos en diversos países que nos han hecho llegar implementos deportivos, sorteando la persecución. Continuaremos el desarrollo de nuestro deporte, no solo para honrar a los cubanos, sino también a todos aquellos que en el mundo nos han apoyado», aseguró Raúl Fornés, vicepresidente primero del Inder.