El joven Jordan Díaz comenzó su temporada invernal bajo techo con un registro de 17.07 metros. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 19/02/2020 | 10:05 pm
Nadie duda que por estos días, más bien en febrero, el atletismo mundial se nombra Armand Duplantis, el sueco nacido en Estados Unidos que tiene a miles de aficionados al borde del delirio cuando agarra su pértiga, corre y se eleva. En noviembre cumple 21 años y su lozanía le ha dado por hacer lo que nadie: romper dos veces en una semana el récord mundial de su especialidad. Primero en Torun, Polonia, el 8 de febrero burló los 6,17 metros y siete días después quebró su propia marca universal por un centímetro en Glasgow, Escocia.
Ayer, de nuevo, todos los ojos miraban incisivamente al benjamín europeo con una asombrosa estela triunfal desde categorías menores. Por cuarta vez competía en el año, por cuarta vez en febrero, y nada más lógico que intentara lo que todos querían que intentase. Desafió tres veces los 6,19 metros, mas no pudo derrotarlos y así entonces su fresco récord mundial ganó un día más de vida. Eso sí, mantuvo su invicto en la temporada, merced a un registro de 6,07 metros.
A la pista de Liévin, al norte de Francia, acudieron aproximadamente 5 000 personas, muchas de ellas, seguramente, para atestiguar el posible logro de una nueva gesta del sueco. Sin embargo, entre los 180 competidores extranjeros en la quinta y penúltima fase del Tour Mundial bajo techo estaban tres cubanos: la garrochista Yarisley Silva y los triplistas Cristian Nápoles y Jordan Díaz.
Ese trío se probó por primera vez en la actual temporada invernal europea y se incluyeron en el podio de premiación la experimentada pinareña y el joven habanero Jordan, quien en tres días estará cumpliendo 19 años. El capitalino Nápoles terminó en la novena posición entre 11 competidores, con marca de 16,57 metros.
Yarisley culminó igualada en la tercera plaza con la sueca Angelica Bengtsson, con registro de 4,73 metros logrado en su último intento, pero luego la antillana no saltó más. La prueba la dominó la estadounidense Sandi Morris (4,83 metros), seguida por la venezolana Robeilys Peinado (4,78 metros).
Mientras que Jordan, igualmente tercero, se estiró hasta los 17,07 metros, conseguido en su tercera oportunidad, y se despidió con todos sus saltos sobre los 16,94 metros. El burkinés Hugues Fabrice Zango culminó en la cima, con 17,51 metros, escoltado por el azerí Nazim Babayev (17,15 metros).